Texas aplicó hoy la pena de muerte a un hombre afroamericano que hace ocho años fue hallado culpable de matar a su madrastra en la comunidad de Fort Worth, en la segunda ejecución en las últimas 24 horas en esta entidad.
Voceros del Departamento de Justicia Criminal de Texas informaron que Reginald Perkins, de 53 años, fue declarado muerto a las 18:24 horas (00:24 GMT del viernes), minutos después de que se le inyectara una dosis letal de drogas.
La ejecución se efectuó en la Cámara de la Muerte de la Unidad Carcelaria Walls, en Huntsville, a 250 kilómetros al sureste de Dallas.
Perkins fue sentenciado al castigo capital en 2000 por estrangular a su madrastra, Gertie Perkins, de 64 años el 4 de diciembre de 2000 en Fort Worth.
El homicida escondió el cadáver de la mujer en la cajuela del propio automóvil de la víctima y al ser detenido, él mismo condujo a la policía y a su padre a donde había ocultado el cuerpo.
El reo tenía una larga lista de antecedentes penales. Las autoridades en Ohio lo habían sentenciado a cadena perpetua por violación, pero alcanzó libertad condicional en 1986.
En 1994 perdió esa garantía y regresó a la cárcel para ser liberado de nuevo en febrero del 2000.
Diez meses después fue acusado y declarado culpable de la muerte de su madrastra para ser luego sentenciado a la pena de muerte.
Perkins fue el tercer reo ejecutado en esta entidad este año.
Texas planea otras tres ejecuciones la próxima semana.
