MARGINACIÓN
Los habitantes tienen que recorrer varios kilómetros en busca de solución a sus problemas; carecen de los servicios más elementales.
Sombrerete, Zac.- La comunidad El Carrizo se encuentra olvidada por las autoridades estatales y municipales. En pleno siglo XXI no cuentan con energía eléctrica, agua potable ni drenaje.
El delegado Juan José Loera Díaz señala que tienen que recorrer alrededor de cinco horas para poder llegar a la Presidencia Municipal de Sombrerete y por eso no reciben ningún programa que los beneficie.
Se ubican en plena Sierra a diferencia de las comunidades cercanas a Sombrerete que se comunican en 10 minutos con las autoridades para hacer sus solicitudes.
Atraso. Aparte de eso indica que los funcionarios no los visitan y se encuentran olvidados de las diversas acciones que ejecuta la Presidencia Municipal.
No cuentan con agua potable y beben de los ojos de agua que se ubican a cinco kilómetros de la comunidad de los habitantes vecinos. Van a buscar el agua como pueden y la traen por medio de burros o caballos.
Indican que en noviembre le trajeron escritos al director de Desarrollo Social del Ayuntamiento, Guillermo Canales Sánchez, donde le solicitan diversos servicios, pero no han obtenido respuesta.
Demanda. Piden a la gobernadora Amalia García Medina que los apoye con los servicios ya que no cuentan con nada y los 150 habitantes de El Carrizo tienen carencias de todo tipo.
No hay transporte para acudir a la comunidad y se sienten totalmente aislados de Sombrerete. Los habitantes deben pedir “raid” para salir a la comunidad más próxima que es Milpillas de la Sierra y se ubica a 20 kilómetros.
Empleo. Cuentan con Casa de Salud y una doctora acuden cada uno o dos meses a curar a los que estén enfermos en ese momento, principalmente de gripes, resfriados y diarreas.
Deben salir a realizar sus compras y sólo viven de la agricultura por lo que también solicitan empleos temporales ya que así los beneficiaban en la administración pasada.
“Ya no queremos ser un pueblo olvidado por las autoridades. El camino se encuentra muy malo y las camionetas son las que pagan los platos rotos”, señaló.
Por Brisia Arlette Ramírez
El Siglo de Durango
DATOS.
Alrededor de 150 habitantes de la comunidad El Carrizo que se ubica en plena Sierra se encuentran olvidados sin servicios de ninguna especie: agua, luz o drenaje.
Cinco horas de camino los separan de Sombrerete y piden a la gobernadora Amalia García que los apoyen y les otorguen empleos temporales que los beneficien.
Cartas-compromiso
Reclaman los habitantes de las comunidades enclavadas en la Sierra de Sombrerete que los políticos sólo los van a ver cuando necesitan los votos, pero amenazan ahora con hacerles firmar cartas-compromiso donde les van a recordar sus promesas, pues cuando llegan al poder todas las promesas de servicios para sus comunidades se olvidan y viven en la más completa pobreza y en el atraso sin los servicios que ya se tienen en las demás comunidades cercanas al municipio. No conocen las estufas de gas, cocinan con leña y no cuentan ni con transporte para comunicarse con las comunidades vecinas.