FIN DE UNA ERA Estimados amigos, llegamos al final del torneo regular, etapa de contrastes en la que un grupo de equipos luchan por llegar a la liguilla, en tanto otros por su permanencia en la Primera División.
Esta colaboración la dedico a la partida de uno de los equipos de mayor tradición en el futbol nacional, los Rayos del Necaxa. Cómo no recordar a todos aquellos jugadores que en los años sesentas formaron un cuadro de gran ascendencia como Antonio "Piolín" Mota, Pancho Majewski, Mario "Pichojos" Pérez, Javan Marinho, "Tato" Linares, Pascual Coronel, Pedro Dellacha, etcétera, dirigidos por Miguel Marín, algunos de sus integrantes, incluido su técnico, formarían parte de la Ola Verde del Laguna, y posteriormente Pedro Dellacha sería técnico de Santos Laguna. El cariño por este club estaba cimentado por la vieja leyenda de los once hermanos. Vendría un cambio de dueños y de nombre, en una segunda desaparición en 1971, transformándose en los "Toros" del Atlético Español, de esa época de los setentas se recuerda a Jan Gomola, Atilio Ramírez, Juan Rodríguez Vega y Rodríguez Jara, Reginaldo Ramírez, Alejandro Roman, JJ Muñante, del Laguna se llevarían a Carlos Eloir Peruci. Un jueves por la noche fueron protagonistas de una cruenta batalla campal contra su acérrimo rival, el Atlante, que tuvo por repercusión la modificación del reglamento de sanciones de la Comisión Disciplinaria.
Producto del cambio de nombre, un buen número de los aficionados seguidores del tradicional Necaxa dejarían sus filas y se ausentarían del estadio, situación irremediable a pesar de regresar al nombre de origen y al surgimiento de una gloriosa década, la de los años noventas.
La obtención de campeonatos hizo que los Rayos fueran considerados como el equipo de la década, y es que en sus filas se tenía a jugadores como su eterno portero Nicolás Navarro, los temibles Lalo Vilches, "Chema" Higareda , Salvador Cabrera y Octavio "Picas" Becerril; mención aparte merecen Ignacio Ambriz, Ivo Bassay, Ricardo Peláez, Alberto García Aspe y el inmenso Alex Aguinaga, como integrante de Santos Laguna era para mí todo un lujo enfrentarlos.
Los detalles de los grandes nunca se olvidan, en la final de 1996, por las limitaciones de espacio y la algarabía en el Estadio Corona, tuvimos que reubicar el sitio de realización de la prueba antidoping, y convenimos hacerlo en el vestidor del Necaxa, hasta ahí acudimos Pedro Muñoz y un servidor, obviamente el ambiente era triste, sin embargo Alex Aguinaga y Nicolás Navarro se acercaron a felicitarnos.
El cambio de sede a la Ciudad de Aguascalientes, así como la construcción de su muy bonito estadio, no fueron suficientes para rescatar a esta institución. Queda un excelente recuerdo de ese gran equipo que entre muchos de sus logros tiene el haber derrotado al Santos de Pelé y un tercer lugar en el Mundial de Clubes. De todo corazón les deseamos un pronto regreso. ¡Hasta la próxima!