Sana alimentación. De una alimentación adecuada depende el desempeño escolar y el aprendizaje de los niños.
El desayuno es uno de los alimentos más importantes del día y para los escolares, recobra una importancia especial porque de esto depende directamente su desempeño y el aprendizaje en las aulas.
El director del Centro de Salud Isauro Venzor, José Antonio Adame, atribuye los altos índices de obesidad y sobrepeso a los malos hábitos alimenticios, que se traducen en la sustitución de un desayuno balanceado por un "tentempié" y la muy conocida "comida chatarra" o con alto contenido de calorías, que se les facilita comprar a la hora del recreo en las escuelas.
El primer alimento del día aporta un cuarto de las necesidades nutricionales de los niños, de manera que cuando no lo reciben adecuadamente, carecen de la energía y vitalidad necesarias para afrontar el esfuerzo físico e intelectual que les exigen las actividades escolares.
Esto, aunado a que un desayuno inadecuado hará que los pequeños sientan la necesidad de energías a media mañana, las que suelen encontrar en productos con alto contenido de azúcar y ácidos grasos, como las golosinas, las papitas y los refrescos que además, suelen representar un mayor gasto que si llevan un almuerzo preparado desde casa.
Los pequeños que acuden con el estómago vacío a la escuela, no muestran el mismo desempeño y desde luego, están expuestos a desarrollar desnutrición, que favorece las enfermedades infecciosas.
Quienes ya tienen el antecedente familiar, pueden registrar un aumento del peso y masa corporal, con todas las consecuencias negativas que esto implica.
Se considera que un desayuno ideal debe estar compuesto por una ración de cereales, un lácteo y fruta fresca, aunque también se puede añadir otros elementos como mermelada o miel para el aporte de energías.
Cuando los padres de familia no tienen el tiempo suficiente para dar de desayunar a sus hijos en casa, deben considerar la importancia de que estos mismos elementos formen parte del lonche que consumirán en el recreo.
Otro aspecto importante a considerar es la exigencia de calcio, que se vuelve mayor en la medida en que los pequeños crecen, por lo cual se debe procurar los alimentos ricos en este elemento. Se considera que los niños entre cuatro y ocho años requieren de 800 miligramos por día, mientras que los de nueve y hasta los 18 años, demandan mil 300 miligramos.
Son proveedores de calcio el salmón, sardinas, espinacas, brócoli y las almendras.
Consejos Médicos
FUENTE: CENTRO DE SALUD DE GÓMEZ PALACIO
Saludable
En la medida de lo posible, hay que procurarles una alimentación saludable.
⇒ Se recomiendan cinco raciones de frutas o verduras al día.
⇒ También deben consumir lácteos tres veces al día, pues su cuerpo demanda mayores niveles de calcio.
⇒ El desayuno debe incluir un lácteo, cereales y fruta.