La cuenta regresiva continúa; faltan menos de 15 días para que George W. Bush deje el poder; los editorialistas de todo el mundo, en especial los norteamericanos, han sido particularmente agudos para hacer una evaluación del que hoy se considera el peor presidente que han tenido los Estados Unidos de Norteamérica.
Uno de ellos, lamenta que en sus últimos meses no haya sido solemne (Shakespearean) o que inspirara sesudas reflexiones, no, dice Frank Rich (*), Bush es “más pequeño que la vida” (smaller than life).
En muchos lugares de Norteamérica se venden relojes que marcan cuántos días, horas y minutos faltan para que Bush se vaya de Washington; las caricaturas sobre sus errores suman miles y hay varios libros únicamente dedicados a comentar los tropiezos de “Bad President”; comparan por ejemplo el sainete del Día de Acción de Gracias de 2003 cuando fue fotografiado en Irak con los soldados y un gigantesco pavo (que era de plástico), con lo que ocurrió hace dos semanas cuando un corresponsal iraquí le lanzó sus zapatos en un gesto de odio y deprecio; casi el 80 por ciento de los americanos dice que no lo va a extrañar, y millones comentan los desaguisados que ha hecho, las violaciones a los derechos humanos y a las garantías individuales que ha cometido.
Para Bush, los culpables son otros: dijo ante la TV: “los ataques del 11 de septiembre vinieron de no sé dónde”, “fue una falla de los servicios de Inteligencia”, cuando por meses le habían alertado sobre lo que iba a suceder; pensando así, tal vez duerma tranquilo, aunque no lo creo; oculta los errores que llevaron a cambiar el panorama internacional en el Oriente Medio, cuando su “agenda de libertad” llevó a la victoria del grupo terrorista Hamas, niega, al igual que el vicepresidente Cheney, que se haya torturado a iraquíes en Irak y en Guantánamo; y con el mismo cinismo en sus últimas apariciones dando entrevistas a la televisión hace chistes sobre las inundaciones de Nueva Orleans, sobre los robos y saqueos en los museos de Irak, sobre las equivocaciones al mencionar países, presidentes y demás.
El dijo orondo, en 2003 que en Irak la “misión ha sido cumplida”, y la guerra sigue igual seis años después; dijo que había terminado con los terroristas de Al Qaeda, y ahora están más fuertes que nunca en Afganistán, afirma que ha mantenido a los Estados Unidos como un país fuerte, y sufre ahora la mayor crisis económica de su historia, y cuando se acumulan las evidencias de sus decisiones poco éticas, violatorias de las leyes internacionales, o francamente erróneas, acusa a los medios de comunicación; Condoleezza Rice, al igual que Donald Rumsfeld, se quejan de los medios de comunicación por “reportar una y otra vez los aspectos más negativos de la guerra”, como si hubiera en algún momento aspectos “positivos” en cualquier guerra.
El tiempo se acaba, y envuelto en la negación megalómana, el ya casi expresidente tiene la convicción de que cada una de sus acciones ha sido bendecida por Dios “he aprendido que Dios es bueno, todo el tiempo”, dijo recientemente en una entrevista cuando le preguntaron qué había aprendido.
La historia dirá cuánto daño ha hecho en estos ocho años a su nación, a la democracia y a los derechos humanos, a la ecología y aún al sentido común, pero él, haciendo a un lado todo esto, ya está preparando con el siniestro Kart Rove, forjador de muchas de sus mentiras, su “legado a los norteamericanos”.
Así es la vida, y el 20 de enero comienza otra etapa para los Estados Unidos… y para el mundo entero.
(*) A President Forgotten but Not Gone F. Rich, New York Times enero 4, 2009.
BIEN Y DE BUENAS
¿En qué inviertes tu tiempo?
Ahora que comienza el año vale la pena reflexionar en qué ocupamos nuestro tiempo, que los poetas afirman es“el tejido de lo que está hecha la vida”.
Podemos ocupar el tiempo, todo nuestro tiempo en el trabajo, los negocios, ir de un lado a otro, afanarnos por “triunfar”, por tener más, por “progresar”; esto es bueno, merece elogios. Pero, ¿valen la pena los esfuerzos y los empeños si dejas a un lado o relegas lo más importante? La familia, los amigos, los compañeros, son los que te darán el gozo de vivir que estás buscando todos los días.
El trabajo es importante, pero no es lo más importante; en este 2009 recuerda que, para vivir plenamente, es básico invertir tu tiempo con la familia, los amigos, los compañeros, ellos te lo agradecerán y tú estarás bien y de buenas.
raalvare@infosel.net.mx