Necaxa y Santos igualaron a dos goles el domingo en Aguascalientes; normalmente un empate en patio ajeno suele ser buen resultado, pero después de ver lo acontecido en tierras hidrocálidas da la impresión de que la escuadra lagunera debió haber obtenido los tres puntos en disputa.
Temprano en el partido Santos se fue adelante en el marcador con un muy buen gol de Benitez, parecía que ésto le daba a los verdes la oportunidad de aprovechar los espacios que dejarían los necaxistas en su afán de ir al frente buscando la igualada, pero los laguneros se hecharon muy atrás, no se si por instrucciones del banquillo -no lo creo- pero le cedieron casi totalmente la iniciativa al rival que lo aprovechó muy bien y antes de un cuarto de hora ya había emparejado los cartones.
Cuando se decidía a ir al frente el cuadro comarcano daba la impresión de que fácilmente podía causar daño a los hidrorayos, si no generaba muchas llegadas era por la falta de inciativa que le permitía al Necaxa atacar y presionar hasta darle la vuelta al marcador casi al final de la primera mitad.
El lapso complementario ciertamente cambió la decoración del juego, estando abajo en el marcador Santos tenía la obligación de ir a buscar la meta contraria; Daniel hizo cambios buscando más profundidad y con la entrada de Vuoso lo consiguió, el "Toro" a gran pase de Ludueña logró la igualada pero hasta ahí, volvió la tónica de la primera mitad y aunque pareciá que lo santistas tenían lo suficiente para ir por la victoria fueron parcos y tal vez hasta conformistas, al final solo se logró un punto.
Al equipo lagunero le sigue costando mucho mantener un buen paso en el torneo, pasa de una buena actuación como frente a Monterrey a una deslucida como la del domingo contra Necaxa, si bien es cierto que no perdió creo que se pudo haber ganado hasta con cierta holgura, la regularidad es el objetivo que debe perseguir el cuadro santista, Daniel Guzmán tiene que apretar firmemente algunas tuercas que están aparentemente flojas en el equipo.
Mucha chamba tendrá Santos en la semana, recibe al Impact de Canadá en la Concachampions y tiene que vencerlos por tres goles sin recibir en contra si quiere avanzar sin más complicaciones a la siguiente ronda.
Luego enfrentará a Cruz Azul en el Corona el próximo domingo, un rival que si bien no está teniendo una gran campaña siempre es un rival peligroso aunque tendrá alguna ausencia.
Insisto en que si algo dentro del vestidor no está funcionando bien es buen tiempo de arreglarlo, todavía falta mucho torneo y sabemos de lo que este equipo es capaz si las cosas están en su sitio en su seno interno.
