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‘El político no es buen político’

Político rudo. En el escenario Víctor Trujillo se pone la piel de un político de derecha. (AGENCIA REFORMA)

Político rudo. En el escenario Víctor Trujillo se pone la piel de un político de derecha. (AGENCIA REFORMA)

Agencia Reforma

Arma un personaje de derecha nada piadoso con la comedia.

Primero destacó por sus habilidades para hacer reír, después trascendió por sus personajes —tanto incómodos como irresistibles— para la clase política. En alguna ocasión dijo que solamente un payaso tenebroso podía ponerse al tu por tu con los funcionarios.

Su éxito detonó cuando el payaso cínico y malhablado comenzó a tener más credibilidad e influencia que sus entrevistados.

Víctor Trujillo, quien hiciera sus pininos en el mundo del espectáculo doblando a Al Pacino en El Padrino, ha consolidado su trayectoria como analista y comentarista político en programas como Tercer Grado, mientras su hijo predilecto, Brozo, continúa destazando con ironía los sucesos de la “polaca” nacional a través de su programa El Notifiero.

Ahora, Trujillo se pone el traje de un político de derecha, tan patriota como persignado y que cae en la hipocresía del que avienta la piedra y esconde la mano en la obra de teatro Lobos, que escenifica lo que es ahora la vida política nacional: una tragedia que hace reír.

La puesta en escena, dice, es un drama que termina por representar una catarsis para el espectador. La oportunidad de reir y reflexionar sobre lo que sucede en el entorno, los personajes no son más que el reflejo caricaturizado de la clase gobernante, donde hasta las buenas intenciones están empapadas con la sospecha, por eso las respuestas de Trujillo a las preguntas sobre política no dejan de tener un doble sentido, el mordaz comentario tras bambalinas para hacer reír, y pensar.

¿Qué tanto te nutres de la crítica política para estos personajes?

Es el paquete histórico, es la mochila que cargas, entonces cuando llega una oportunidad de estas, donde todo lo que te gusta está mezclado: buenos actores, tema político, actualidad, un buen director… son esos como regalos que de pronto te da la vida.

¿Qué tan absurda es ya la política que la tragedia hace reír?

Esta catarsis todavía es distinta, porque aquí no estamos revelando nada, más bien la gente reconoce el código, nos ponemos en el mismo código y sabemos perfectamente de qué pata cojeamos y qué es lo que estorba, qué es lo que ya no sirve y qué es lo que está caduco.

Entonces esto es un poco de esa catarsis de la risa ácida que de pronto la gente empieza a reírse y de pronto ya empieza a sentirse mal a la mitad de la carcajada porque se da cuenta: ‘¡me estoy riendo de esto!’ Y también en esa propia catarsis ya no es ni siquiera la denuncia sino que es: démonos cuenta hasta dónde hemos llegado y por qué nosotros lo hemos tolerado.

Interpretas a un político de derecha, ¿Jalisco sería como estar en la Disneylandia de la derecha?

Más bien si yo armo un personaje de derecha nada más sí me abstengo de hacerlo piadoso, para que no sea comedia.

Aquí los gobernantes no prohíben los besos, pero al contrario, mientan madres…

Bueno, algunos, pero en el estado etílico, o sea, pero como tú ves, mi personaje se mantiene sobrio todo el tiempo, entonces no tiene necesidad de usar esas herramientas.

¿Es eso contradictorio con los personajes de derecha que hay aquí?

Nuestra historia es contradictoria.

Y la piedad que permite que los gobernantes regalen dinero a la Iglesia?

Bueno, es justamente de lo que se trata la obra, el divorcio de la clase política y la gente, supuestamente ellos deben administrar nuestros bienes, pero parece que estamos jugando dos juegos totalmente distintos y que vivimos en dos países distintos, eso ya lo sabemos y es tan claro que por eso la obra llega a ese punto. Ni siquiera se trata de hacer leña del árbol caído, ni futurear; es esto lo que estamos viviendo.

¿El político es buen o mal comediante en México?

Yo tengo la idea de que el político se convierte en tal en México porque no la pudo hacer en otra cosa

¿Como el payaso de crucero que cuenta chistes porque es la opción que tiene para vivir?

No, el payaso de crucero es payaso de crucero porque está jodido y no tiene otra cosa qué hacer.

A lo mejor algunos (políticos) quisieron ser buenos licenciados, otros, buenos doctores, buenos ingenieros y finalmente tuvieron que ir a dónde hay, porque por donde empezaron no pudieron hacerla.

¿El político se hizo político y estamos jodidos?

El político no es buen político y sí estamos jodidos.

Crítica mordaz

Los protagonistas de la obra Lobos tienen sus propios puntos de vista sobre la puesta en escena.

* No es una obra para pegarle a una persona o a un partido. Los Lobos habla parejo de la clase política nacional”, Víctor Trujillo.

* A mí me dan risa todas las cosas que decimos (sobre el escenario), es lo que habitualmente escuchamos en los políticos”, Pedro Armendáriz.

* La puesta en escena no es un panfleto político ni refleja la corrupción política de México. Muestra una visión mundial”, Roberto D’Amico.

* Cuando uno encuentra lo que el público quiere y se hace con el respeto que se merece, da resultados”, Rafael Sánchez Navarro.

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