En el olvido. Aunque se encuentra dentro de la mancha urbana, el ejido El Fénix, ubicado al norte de Gómez Palacio, aún carece de los servicios básicos como alumbrado y seguridad.
Aunque está rodeado de fraccionamientos, el poblado aún carece de algunos servicios.
Doña Verónica vive en el ejido El Fénix, desde hace ya varias décadas. Se localiza al norte del municipio de Gómez Palacio, en donde el tiempo pareciera haberse detenido.
No hay drenaje, pavimento y el alumbrado público es escaso, pese a encontrarse rodeados de grandes fraccionamientos que cuentan con todos los servicios básicos.
Sobre la vigilancia policiaca, la mujer sólo sonríe, pues asegura que "sólo vienen cuando saben que hay un pez gordo".
En su casa no hay banqueta y mucho menos cordonería. Y es que ella, como el resto de las amas de casa y vecinos, esperan la llegada del servicio de drenaje.
"El año pasado, (Ricardo) Rebollo -ex alcalde de Gómez Palacio-, nos prometió que llegaría este servicio, una vez que terminara la introducción en el ejido El Vergel, pero jamás sucedió", cuenta molesta la ama de casa, quien ignora la evolución de estos trabajos en aquella comunidad.
Ante la falta de servicio de drenaje, las letrinas son algo común en este lugar, pero a los niños se les puede ver en cualquier rincón del patio de su casa, como es el caso de Doña Verónica.
De acuerdo con los vecinos de esta comunidad, durante el verano, el olor que despiden estas improvisadas letrinas, es insoportable, razón por la que son instaladas a una distancia considerable de sus hogares.
Cuando es necesario descargarlas, deben hacer un llamado al Municipio para que hagan este trabajo, acción que podría demorar algunos días.
A diferencia del drenaje, el servicio de agua potable no es un problema para los habitantes de esta comunidad, contrario a lo que sucede en otras partes.
"Hace un par de años, sí era un verdadero dolor de cabeza la falta de agua, pero hoy todo eso ha cambiado", dice sonriente doña Verónica, mientras lava su ropa en el patio de su hogar.
De acuerdo con los vecinos del ejido El Fénix, las eternas fallas en el alumbrado público y la ausencia de los elementos policiacos, ha facilitado el trabajo de los ladrones.
"Tan sólo la semana pasada me vaciaron mi casa, se llevaron todo", dice preocupada una de las vecinas, quien prefirió mantenerse en el anonimato.
"Muebles, aparatos eléctricos, de todo se llevaron y los policías ni sus luces", comenta molesta la madre de familia, quien asegura haber reportado dichas fallas al Municipio sin éxito alguno.
"Las lámparas que rodean la escuela y la placita principal, tienes años que no funcionan, lo que permite que los vagos ronden por las calles con toda tranquilidad", comenta Doña Verónica.
Salir de casa por las noches y dejar sus viviendas por unos momentos, ya no es posible en esta comunidad.
Pero más que exigir la presencia de los policías en este ejido, las madres de familia piden a las autoridades municipales, atender su llamado de comenzar con la introducción del drenaje. "En verdad es lo que más nos preocupa", dice doña Verónica.
Y es que, de acuerdo con los vecinos, una vez que cuenten con este servicio, el resto vendrá en corto tiempo, como lo es la pavimentación y el acceso a los camiones de ruta.
Dolor de cabeza
Desde hace décadas, habitantes del ejido El Fénix, han lidiado con los siguientes problemas:
⇒ Falta de pavimento en cada una de sus calles.
⇒ Drenaje, servicio que ha sido sustituido por las antiguas y malolientes letrinas.
⇒ Cordonería en cada una de las cuadras o lotes.
⇒ Continuas fallas en el servicio público, aun cuando éstas son reportadas con oportunidad.
⇒ Nulos rondines de vigilancia por parte de elementos de Seguridad.
⇒ Robos a casa habitación.
⇒ Falta de unidades del transporte público.
⇒ Fallas en el servicio de recolección de basura.
FUENTE: INVESTIGACIÓN DE EL SIGLO DE TORREÓN
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