El presidente Barack Obama eliminó "todas las restricciones" para visitar y enviar remesas de Estados Unidos a Cuba y abrió un nuevo espacio para facilitar la comunicación de los cubanos mediante diversas tecnologías.
No obstante, el gobernante no tocó aspectos del embargo comercial, vigente hace más de cuatro décadas, y dijo que su gobierno tratará de mantenerse al margen de la nueva política de comunicaciones que quedará en manos privadas. Además, dijo que el presidente Raúl Castro podía bloquear las nuevas medidas, si lo deseaba.
Por su parte, el ex presidente Fidel Castro aseguró que "Cuba ha resistido y resistirá", y que "no extenderá jamás sus manos pidiendo limosna", horas después del anuncio de Obama.
Mientras que el portavoz Robert Gibbs junto a Dan Restrepo, asesor especial de Obama y director para el Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional de EU dijo que la decisión va a contribuir a "hacer realidad la aspiración de libertad" de los cubanos.
Con estas decisiones, dijo Gibbs, Obama no cede a presiones de algunos gobernantes de la región que han demandado un cambio drástico en la política de EU hacia Cuba antes de la Cumbre de las Américas de este fin de semana en Trinidad y Tobago.
Precisó que el envío de dinero a altos funcionarios gubernamentales y a miembros del Partido Comunista sigue prohibido. Otras medidas incluyen ampliar la lista de artículos que se pueden enviar como regalo a Cuba, tales como ropa, artículos de higiene personal, semillas, equipo de pesca y objetos personales.
Aproximadamente 1.5 millones de estadounidenses tienen familiares en Cuba.
Según una consulta de WorldPublicOpinión.org, el 59% de los estadounidenses respalda la idea de que "es el momento de ensayar un nuevo enfoque hacia Cuba, porque el país está listo para el cambio". Pero un 39% es partidario de mantener la política de aislamiento.
