Daños irreversibles. La empresa minera podría enfrentar fuerte cargos por haber dañado un patrimonio de la humanidad.
La Policía china inició una investigación contra una empresa minera que, al parecer, agujereó un tramo de la Gran Muralla de 2 mil años de antigüedad durante una prospección en busca de oro, informó ayer la agencia oficial Xinhua.
La empresa, Hohhot Kekao Mining, dañó alrededor de 100 metros del monumento más conocido de China con dos agujeros de cinco metros de profundidad, ocupando un área de unos 300 metros cuadrados, a la altura de la localidad de Pogendi.
El responsable del departamento de patrimonio cultural regional, Wang Dafang, aseguró que el daño a la muralla era "irreparable" y recordó que la compañía había sido advertida en cinco ocasiones para que detuviera sus operaciones "pero continuó su vandalismo".
El tramo dañado fue construido durante la dinastía Qin (221-207 AC), primera que unificó China y en la que el emperador Qin Shihuang inició los trabajos de unión de muros locales que acabaron conformando la Gran Muralla.
El monumento se erigió para evitar la entrada de pueblos invasores del Norte de Asia, aunque no siempre lo consiguió y algunos de ellos, como los manchúes o los mongoles, incluso llegaron a gobernar el país asiático. La Gran Muralla llegó a medir más de 8 mil kilómetros, pero un tercio de su longitud quedó destruido debido a la erosión natural o a la mano del hombre (minas, carreteras, etc).
Muchas casas rurales cercanas a la muralla, por ejemplo, están construidas con piedras sacadas del monumento, aunque también algunos tramos de éste está poco llamativo que es fácil confundirlo con una vieja pared sin historia.
Pese a ello, destruir tramos de la Gran Muralla puede ser penado según la ley china con 10 años de prisión o multas de hasta 500 mil yuanes (equivalentes a 73 mil dólares, o 48 mil euros).
Piden acciones contra el calentamiento global
La canciller alemana Angela Merkel instó ayer a que Estados Unidos, China e India se comprometan a tomar medidas que contrarresten el calentamiento global a fin de impedir un fracaso de la cumbre sobre clima el próximo mes en Copenhague.
"Un fracaso de la conferencia sobre el clima mundial en Copenhague significaría un revés en la política internacional sobre clima por varios años", destacó Merkel en un discurso ante el Parlamento en la presentación del nuevo programa de su Gobierno. "No podemos afrontar eso", advirtió.
Merkel dijo que la Unión Europea ha expuesto una posición clara sobre la lucha contra el cambio climático, y "ahora esperamos contribuciones de Estados Unidos y de países como China e India".