El ex gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) aventajaba al oficialista Partido Acción Nacional (PAN) en las elecciones del domingo para renovar la totalidad de la Cámara de Diputados.
El ex gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) aventajaba al oficialista Partido Acción Nacional (PAN) en las elecciones del domingo para renovar la totalidad de la Cámara de Diputados, según encuestas de salida y los primeros conteos preliminares oficiales.
Más de 77 millones de mexicanos fueron convocados a unas elecciones que según autoridades electorales y observadores se realizaron sin mayores incidentes, y que han servido para medir el desencanto con la clase política y el apoyo al partido del presidente Felipe Calderón, quien ha hecho del combate al narcotráfico el eje de su gobierno.
Dos encuestas de salida divulgadas por la cadena Televisa y el periódico Milenio señalaron que el PRI —que gobernó el país por siete décadas continuas hasta el 2000— tenía una ventaja de 11 puntos porcentuales sobre el PAN.
Con un 11.34% de un conteo preliminar oficial, el PRI tenía un 34.77% y el PAN un 26.95%.
En la conformación actual de la cámara baja, el PAN tiene la mayoría relativa con 206 de los 500 escaños. Le siguen el Partido de la Revolución Democrática (PRD), de tendencia izquierdista, con 126, y el PRI con 106.
En los comicios del domingo se elegirán de manera directa 300 diputados y los restantes 200 serán repartidos a partir del porcentaje de votación de cada uno.
Enlaces a datos del PREP 2009
En la jornada también se eligieron seis de 31 gobernadores y centenas de alcaldías y legisladores locales, en un país sumido en una recesión económica y con varias regiones afectadas por la violencia del narcotráfico.
A nivel estatal, encuestas de salida de empresas privadas señalaron que en los estados de Campeche, Colima y Nuevo León el PRI mantendría las gubernaturas.
Aún no se daban tendencias para los estados de Querétaro, San Luis Potosí y Sonora porque o estaba muy cerrada la diferencia entre el primero y segundo lugar o porque las leyes locales no permiten divulgar sondeos sino hasta más tarde.
La jornada se realizó con algunos incidentes como en la municipalidad de Ecatepec, vecina a la capital en el Estado de México, donde se registró un enfrentamiento entre supuestos vendedores ambulantes y policías que acudían a verificar una denuncia de que alguien presionaba a la gente para que votara por el PRI. Cinco policías resultaron heridos, incluido uno por un disparo.
Para la Organización de los Estados Americanos (OEA), que por primera vez realiza una misión de observación electoral en México, la jornada se desarrolló sin mayores incidentes y sólo recibió una denuncia del partido minoritario Convergencia sobre posibles actos irregulares en el estado sureño de Oaxaca, relacionada con un supuesto acto público del gobernador y la detención de uno de sus presidentes municipales, aunque no dio detalles.
"Lo importante es que esta ha sido una jornada sin incidentes... mayores que puedan de alguna manera marcar el hecho electoral del día de hoy como un hecho anómalo. Todo lo contrario, parece haberse desarrollado con normalidad", dijo a reporteros el jefe de la misión de la OEA, Dante Caputo.
La elección nacional ocurrió en medio de un inusual movimiento respaldado por intelectuales, líderes de opinión y ciudadanos en general que promovió la emisión de votos nulos en protesta por una clase política que, a juicio de algunos, sólo vela por intereses de grupo y no de los ciudadanos que la eligen.
"Siempre he votado por el PAN, pero esta vez he anulado mi voto, porque ahora los partidos no funcionan", comentó Marta Tamayo, de 43 años, tras votar en la capital mexicana. Tamayo trabaja en un área de recursos humanos.
La campaña tuvo tanto impacto que en el último par de semanas el mensaje de la mayoría de los actores políticos —incluido el presidente— fue llamar a la ciudadanía a no anular su voto y ser parte de los electores que decidirán la nueva conformación de la Cámara de Diputados, actualmente con mayoría relativa del PAN.
"El voto es un derecho y es un deber; un derecho y un deber que millones de ciudadanos en todo el mundo, en varios países no tienen. Y me parece que debemos aprovecharlo", dijo Calderón después de emitir su sufragio.
Algunos votantes manifestaron su rechazo a la anulación.
"Anular mi voto sería como tirar mi voto a la basura", dijo Mauro Zarza, un empleado gubernamental de 56 años.
Calderón también enfrenta el domingo una prueba del apoyo a su lucha antidrogas, sobre todo porque el PAN fincó su campaña electoral precisamente en el combate al narcotráfico que el mandatario ha emprendido desde los primeros días de su mandato.
El PAN prácticamente acusó al PRI de haber tolerado durante sus administraciones el narcotráfico, que se ha cobrado más de 10.800 muertes desde el inicio del actual gobierno en diciembre del 2006.