Al menos seis agentes de la Policía Federal fueron privados de su libertad, al quedarse encerrados al interior de las oficinas de cobro de la extinta Compañía de Luz y Fuerza del Centro en la ciudad de Tula, luego de que un grupo de ex trabajadores soldaran las puertas como parte de sus acciones de lucha para evitar el cierre de la empresa.
Este lunes, unos 150 ex trabajadores de Luz y Fuerza se manifestaron y tomaron de manera momentánea las instalaciones de cobro ubicadas en Tula.
Las puertas del edificio fueron selladas con soldadura, quedando al interior seis agentes federales que custodiaban el lugar.
Ante ello, unos 300 efectivos llegaron al lugar para evitar la toma de las instalaciones y rescatar a los agentes que se encontraban al interior de las oficinas.
Al arribo de los federales, los electricistas se dispersaron y evitaron una confrontación.
En la zona permanecen alrededor de 500 policías quienes mantienen el control de la división Juandho, así como de las oficinas de Luz y Fuerza, ya que desde la semana pasada se recrudecieron las acciones de inconformidad.