La realidad
Al unísono de la gran fiesta popular y algarabía de la mayor parte de la sociedad Estadounidense y con la expectación de todo el mundo, presenciamos los actos ceremoniales de la toma de posesión de Barack Obama, cuyo carisma y personalidad a logrado captar la aceptación y esperanza de muchos países debido a las difíciles circunstancias por la que en su mayoría estamos enfrentando.
Sin embargo la cruda realidad de la crisis endémica que padecemos, se hizo sentir el mismo día con la caída estrepitosa de los Mercados financieros presagiando nítidamente las expectativas sombrías que se cierne en la economía real de una gran parte del mundo.
Inmediatamente al día siguiente de su investidura Obama se reunió con sus asesores económicos y militares lo que muestra como antes lo habíamos comentado las prioridades inmediatas de su gestión, en otra oportunidad nos referiremos a los fuegos pirotécnicos que los medios nacionales dieron a la entrevista del Presidente Calderón con su contraparte mencionado y cuya realidad está muy lejos de lo que se nos informó; posteriormente en los días subsecuentes se reunió el presidente electo de EE.UU. con los líderes de los dos partidos Demócrata y Republicano en el Congreso para discutir la propuesta de su paquete económico que busca la recuperación de su país con una inversión superior a los 800 mil millones de dólares, esperando obtener una rápida aprobación de su plan.
El mismo Obama en reciente declaración enfatizó la gravedad de la situación y lo difícil que será solucionar el problema económico mencionando que se requiere una acción sin precedente y desde luego que no será remotamente de corto plazo; algunos economistas vaticinan una incipiente recuperación para fines de año y otros con los que yo concuerdo, mencionan que tanto lo que aplicó Bush como el plan de Obama son mecanismos que sólo con el transcurso del tiempo probaran su eficacia ya que el involucramiento del gasto público vía estímulos fiscales, rescates financieros, compra de créditos, tasa de referencia por parte de la FED, rescate automotriz etc. No pueden garantizar un estímulo a la economía mediante el aliento al consumidor y se preserve los modelos de negocio en sus diversas actividades que permita una recuperación rápida de la economía de los EE.UU. y por ende ayude a incentivar dicha economía a nivel mundial; yo pienso que nos queda por presenciar mucha volatilidad y deterioro en todo tipo de empresas del mundo, pues los datos y cifras de cierre de año y los presagios de los próximos meses, indican sorpresas desagradables que exacerban el temor y la incertidumbre ya que desafortunadamente aún falta un largo trecho para superar éste sunami económico.
En nuestro país urge se opere de inmediato las acciones anunciadas por el presidente Felipe Calderón con el fin de apoyar el empleo y la economía familiar de la mano de la iniciativa privada; aparte del congelamiento del precio de la gasolina, reducción del gas LP, tarifas eléctricas y productos alimenticios se requiere el derrame de recursos anunciados en un plan de infraestructura y de vivienda que permita aminorar los costos sociales y económicos de la recesión mundial; Banxico por su parte inició una baja en la tasa de fondeo que podrá continuar si la inflación cede como parece en éste momento y el tipo de cambio se pueda mantener a niveles de l3.50 y 13.80 con altibajos abruptos y desde luego un crecimiento negativo para éste año, ya que todos los sectores de la economía se encuentran en franco deterioro.
La posición del sector privado enfatiza se flexibilice las obligaciones fiscales, aligerar la carga tributaria para facilitar la liquidez que están ausentes en el programa del Gobierno pero faltan de considerar la posición de los sindicatos y organizaciones campesinas que no se sienten cabalmente incluidas en éste acuerdo, esperemos por el bienestar de todos que se esfuercen en llegar a consensos satisfactorios por que el tiempo se nos acaba.
