Mónica Monreal de Rodríguez y Blanca Estela Vargas Rubio, manifestaron su molestia por la lentitud para obtener los seguros de sus conyuges fallecidos.
Entre discursos y aplausos de funcionarios estatales y municipales, fueron entregados pies de casa a las cuatro viudas de los agentes de Seguridad Pública municipales que perdieron la vida en julio de 2008, al ser acribillados por un grupo durante un ataque a las instalaciones de la Policía, situación que desmintieron las beneficiadas.
Al término del acto las viudas manifestaron su inconformidad por la lentitud en algunos trámites que han realizado para poder hacer efectivo el cobro del seguro, así como de otros beneficios que perciben tras el fallecimiento de sus familiares, además de la incertidumbre sobre la continuidad en el pago de su pensión y becas de sus hijos, durante las administraciones siguientes.
“Yo no agradezco lo de la casa, ni lo de los seguros, ni nada, porque fue un mal trato, una humillación, siempre irnos a humillar hasta Durango para conseguir una cosa que ellos se merecían, porque mis hijas y siento que las demás compañeras en este dolor, con 100 mil pesos y una casa no vamos a vivir toda la vida, sabiendo que nuestros esposos nos iban a sacar adelante toda su vida”, señaló Mónica Monreal, viuda del agente Roberto Rodríguez.
“Hemos batallado demasiado, realmente no hemos tenido el apoyo de la Presidencia como ellos dicen, nos han abandonado mucho porque ninguno ha visto qué es lo que falta. La casita fue porque fuimos a Durango a pedirle una casa al gobernador”, comentó Concepción Ramírez Martínez, madre de Fernando Guadalupe Madrid.
Fueron las primeras palabras, tras concluir el acto de la entrega de las llaves de un pie de casa ubicada en la colonia San Fernando y donde los funcionarios aplaudieron cuando fueron llamadas una por una las viudas. Sin embargo, aún está pendiente el pago del seguro para dos de ellas y tienen diversas dudas sobre el futuro de su situación.
Blanca Estela Vargas, viuda del oficial Luis Jesús Carranza, señaló que “la casa es el futuro de nuestros hijos, que les dejaron sus padres a sus hijos que se quedaron solos... Hasta ahora no sabemos cómo se van a manejar las becas de los niños y no nos han dado un papel que justifique que nos van a dar la pensión en las siguientes administraciones”.
