Dos gimnasios situados en sectores acomodados de Santiago de Chile resultaron con daños durante la madrugada de hoy por la explosión de sendas bombas de las que ningún grupo se ha responsabilizado hasta el momento, informaron fuentes policiales.
La primera explosión se produjo a la 01.00 GMT y afectó al gimnasio Sportlife, en el municipio de Las Condes, y la segunda ocurrió una hora después en el gimnasio Balthus, en el municipio de Vitacura, ambos en el sector oriente de la capital chilena.
El primer estallido se produjo cuando en el lugar aún había clientes, que resultaron ilesos, pese a que la explosión ocasionó la destrucción de varios ventanales, dijo la policía.
El comandante de Carabineros Rolando Casanueva dijo a los periodistas que esta bomba consistía en un cilindro rellenado con un material explosivo cuya naturaleza se investiga y que fue activado mediante un mecanismo de relojería.
En el segundo caso, según las fuentes, el artefacto explosivo fue lanzado desde el exterior hacia el gimnasio y estalló en una de las piscinas, dañando cañerías y duchas de los jardines.
En el momento de la explosión esas dependencias deportivas estaban vacías.
Xavier Armendáriz, uno de los fiscales encargados de investigar varios ataques similares ocurridos en Santiago en los últimos meses, se presentó en los lugares afectados para iniciar las indagatorias correspondientes.
El Gobierno condenó los ataques a través de la portavoz, Carolina Tohá, quien subrayó que en un sistema democrático como el chileno no se requiere la colocación de bombas para plantear ideas.
"Hay canales para poder expresarse de una manera respetuosa ante los derechos de los demás, sin intimidar, sin amenazar la seguridad de las personas", añadió Tohá a los periodistas.
Subrayó que todos los actores políticos deben ponerse de acuerdo en "condenar este tipo de prácticas y señalar que no son aceptadas" en Chile "como formas de expresión ni son necesarias para expresar ningún punto de vista político, ideal, forma de mirar el mundo o crítica al sistema que se quiera presentar".
Tohá indicó que la investigación sobre estos ataques "está bastante avanzada y tiene que dar sus frutos", para que se identifique a los responsables y éstos sean llevados a la Justicia.