En México. A pesar de la controversia que causó por Banamex Hacienda respaldó la medida de Estados Unidos.
NUEVA YORK, EU.- El banco Citigroup entregó el 34% de su capital a los contribuyentes estadounidenses, 197 años, un mes y 14 días después de su creación.
Si bien quedan pendiente algunos detalles técnicos, el banco completó un esfuerzo de más de un mes para convertir acciones preferentes, que estaban en manos del Gobierno, en títulos comunes.
Citigroup, el tercer mayor banco de Estados Unidos y la institución financiera grande con más problemas en el país, completó el jueves dos ofertas de canje para mejorar su posición de capital.
Inversores públicos, privados y el Gobierno canjearon 58,000 millones de dólares en valores preferentes por acciones comunes del banco, que tiene su sede en Nueva York.
Citigroup dijo que el canje le dejará con más de 21,000 millones de acciones en circulación, que se comparan con las 5,510 millones de finales de junio.
Los 25,000 millones de dólares que canjeó el Gobierno de Estados Unidos son parte de 45,000 millones de dólares que inyectó en un plan de rescate en el Programa de Alivio de Activos en Problemas (TARP).
Los otros 20,000 millones seguirán en la forma de acciones preferentes, que pagan un dividendo anual del 8%. La mayor participación estatal puede presionar más al presidente ejecutivo, Vikram Pandit, para que mejore el desempeño y liquide activos tóxicos.
Más temprano el jueves, Citigroup dijo que venderá un 64% de participación en la correduría Nikko Asset Management Co a Sumitomo Trust & Banking Co por 75,600 millones de yenes (790 millones de dólares).
En Kuala Lumpur, en Malasia, Pandit dijo que el banco se está moviendo "extremadamente rápido" en la venta de activos.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, buscó el jueves preparar al país para más noticias económicas malas, al decir que las cifras del PIB del segundo trimestre mostrarían que la economía se contrajo y que la pérdida de empleos seguía siendo un "gran" problema.
ESPERA OBAMA MALAS NOTICIAS
Obama, conversando con periodistas en la Casa Blanca tras reunirse con la presidenta filipina, Gloria Macapagal Arroyo, dijo que el crédito y el sistema bancario se han estabilizado, una señal de que la economía estadounidense se ha alejado del precipicio.
La cifra preliminar del PIB en el segundo trimestre del año será divulgada el viernes.
Obama dijo que no había visto las cifras del PIB, pero se refirió al consenso de las expectativas de los economistas de que la recesión de la economía había experimentado una "desaceleración significativa durante los últimos meses".
Aunque las pérdidas de empleo aún son elevadas, no están ocurriendo al ritmo de comienzos de año, destacó. "Sospecho que los números del PIB aún mostrarán que la economía se contrajo en el segundo trimestre (y) que la pérdida de empleos aún es un problema grande", dijo el mandatario.
"No vamos a descansar hasta que veamos no sólo una mejora técnica en el PIB, sino hasta que los empleos de los estadounidenses, sus ingresos, se recuperen. Y eso llevará algo de tiempo", sostuvo Obama.
El presidente dijo que algunas mejoras en los últimos meses habían moderado el temor a que Estados Unidos pueda caer en otra gran depresión.
"El sistema crediticio, el bancario, los mercados financieros se han estabilizado en términos generales.
