El presidente Evo Morales rechazó ayer las declaraciones de la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, quien adujo que las relaciones de Bolivia con Irán "no eran buena idea" y que podría tener consecuencias.
Morales en una conferencia de prensa en la región central de Cochabamba se refirió a las declaraciones de Clinton del viernes sobre la visita del presidente iraní Mahmud Ahmadinejad a Bolivia y Venezuela, en noviembre.
"Si las personas quieren coquetear con Irán, deberían ver qué consecuencias podría haber para ellos. Y esperamos que lo piensen dos veces", advirtió la funcionaria estadounidense.
"Dicen que Irán exporta terrorismo. ¿Sabes quién exporta terrorismo? Es aquella gente que manda tropas de su país a otros (países), son los que instalan bases militares en otros países. Ellos son los que practican y hacen terrorismo. Es el Gobierno de EU que practica y hace terrorismo", afirmó Morales.
Agregó que Bolivia es un país "soberano y digno y no acepta ninguna amenaza".
Morales expulsó en 2008 al embajador estadounidense, Philip Golberg, por sospechas de confabulación con opositores, después suspendió operaciones de la agencia estadounidense antidroga a la que acusó de espionaje y a principios de 2009 ordenó la salida de otro diplomático. Como respuesta, EU también dispuso la salida del embajador boliviano.