"Me hicieron torturar, yo soy un torturador", reconoció el ex soldado Jorge Acevedo, que como muchos jóvenes de 18 años se vieron involucrados en el cruento Golpe de Estado que el general Augusto Pinochet lideró en 1973.
La admisión de culpas de Acevedo fue producto de la exhortación que hizo a centenares de ex soldados Fernando Mellado, presidente de la Agrupación de Ex Conscriptos de 1973 de Santiago, para que entreguen información de los crímenes de la dictadura y el paradero de los casos 1,200 detenidos-desaparecidos, según cifras oficiales. "Me hicieron torturar, yo soy un torturador porque me amenazaron que si no torturaba, me iban a matar", declaró.
"Me mandaban los superiores con gente muerta al hombro hasta cierta parte del campo de prisioneros de Cerro Chena. Por la mañana veíamos con anteojos de larga vista que los recogían, metidos en sacos paperos y los tiraban a los camiones", dijo.