Diputados del PRI condenaron la detonación de granadas en Michoacán y llamaron al gobierno federal a ser más eficiente en el combate contra organizaciones delictivas, porque hasta ahora no se han obtenido buenos resultados en esa materia.
El vicecoordinador del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Jorge Carlos Ramírez Marín, dijo que en el país hay una crisis social que deriva en un problema de seguridad pública, por lo que se están formando "los ingredientes de un cóctel peligroso para el país".
"Estamos ante la presencia de los ingredientes, hasta ahora separados, de cóctel peligroso, pues tenemos la presencia del narcotráfico; la cultura de violencia que se ha instaurado sin que el gobierno haga absolutamente nada; el desempleo; y la falta de recursos", señaló.
Advirtió que de combinarse esos elementos, México se enfrentaría a una crisis sin precedentes, por lo cual es importante actuar a tiempo con una política integral que atienda a todos esos problemas.
Al respecto el también diputado priista, César Augusto Santiago Ramírez, atribuyó esa situación de violencia a los escasos resultados obtenidos por el combate a la delincuencia.
"El gran problema es la ineficacia del gobierno; no da resultados en ninguna de las áreas de la vida de este país. Lo que ha pasado en estos últimos días con la criminalidad, es exasperante. No puede ser que ante esto, pensemos que se va a resolver con la reelección de los diputados", comentó.
En tanto el diputado panista, Roberto Gil Zuarth, manifestó que los recientes ataques del crimen organizado en Morelia, Michoacán, son reacciones desesperadas de las bandas criminales ante la "lucha valiente" que libra el gobierno federal contra el narcotráfico.
