Declaraciones. Jeffrey Peek, director general de Cit Group señaló que la empresa está en una difícil situación lo que los obliga a declararse en bancarrota.
WASHINGTON, EU.- Tras esforzarse durante meses por evitarlo, la prestamista CIT Group solicitó protección gubernamental por bancarrota en un esfuerzo por reestructurar su deuda al tiempo que intenta continuar prestando a miles de empresas.
CIT presentó la solicitud el domingo ante un tribunal de quiebras en Nueva York después de que fracasó una oferta a los tenedores de bonos para intercambiar deuda. En un comunicado, CIT dijo que los propietarios de bonos aprobaron por abrumadora mayoría un plan de reorganización preestablecido que reducirá la deuda total en 10,000 millones de dólares, al tiempo que permite que la compañía siga operando.
"La decisión de proceder con nuestro plan de reorganización le permitirá a CIT continuar proporcionando financiamiento a nuestros clientes en empresas pequeñas y en el mercado medio, dos sectores vitales para la economía estadounidense", dijo Jeffrey M. Peek, presidente y director general. Peek ha dicho que piensa renunciar al cargo a fin de año.
Una quiebra con un plan preestablecido agiliza el proceso de reestructuración de la deuda de CIT y podría permitirle librarse de la protección de la corte para fin de año. Además de reducir su deuda, CIT dijo que el plan recorta las necesidades de la empresa de dinero en efectivo durante los próximos tres años, lo cual debería ayudarla a regresar a tener números negros con mayor rapidez.
La maniobra de la compañía le quitará a los actuales accionistas sus títulos comunes y los preferenciales. Eso significa que el Gobierno Federal probablemente perderá los 2,300 millones de dólares que inyectó a CIT el año pasado con el fin de que las acciones preferenciales apuntalaran a la compañía en apuros. Sin embargo, las autoridades podrían haber perdido millones más si no se hubieran negado a proporcionar más ayuda a la empresa anteriormente este año.
Andrew Williams, portavoz del Departamento del Tesoro, dijo que el Gobierno observará de cerca los procesos de bancarrota, pero reconoció que "la recuperación (de su dinero) para los tenedores de valores comunes y preferenciales será mínima".
Entre los poseedores de acciones comunes que perderán su inversión están FMR LLC de Boston con una participación del 9,9% en CIT, y Brandes Investment Partners LP, con sede en San Diego, el cual tiene una participación del 9.7%, de acuerdo con el documento presentado por CIT.
La compañía lleva varios meses intentando evitar un desastre, y en julio estuvo a punto de derrumbarse completamente. Ha pasado apuros para encontrar financiamiento, ya que las fuentes en que solía apoyarse, tales como la deuda a corto plazo, se evaporaron durante la crisis crediticia.
Por su parte, la Reserva Federal se reunirá esta semana para discutir la política monetaria de Estados Unidos y, dado el alto índice de desempleo y la baja inflación que hay en el país, los analistas apuestan a que no habrá cambios en las tasas de interés.
El Comité de Mercado Abierto de la Reserva, que maneja la política monetaria de Estados Unidos, iniciará el martes una reunión de dos días, al término del cual se espera con interés, más que la decisión sobre los tipos, el diagnóstico sobre las perspectivas económicas.
La Reserva ha mantenido desde diciembre del año pasado los tipos de interés a corto plazo -de referencia en Estados Unidos- entre el 0 y el 0.25 por ciento.
Descienden mercados
⇒ Los mercados accionarios regresaron nuevamente a terreno negativo, tras el fuerte repunte registrado por la difusión del PIB de EU del tercer trimestre, que señaló el fin de la recesión de esa economía.
⇒ En el último día de la semana los ánimos optimistas se enfriaron tras la publicación de las cifras de ingreso y gasto personal de los hogares estadounidenses de septiembre.
⇒ Por otro lado, las acciones del sector financiero fueron afectadas por un pronóstico de importantes amortizaciones que enfrentará el grupo financiero Citigroup.
⇒ En general, las ventas de acciones se multiplicaron en todos los sectores. En consecuencia, el índice Dow Jones cayó 2.51%.
