Turquía y Armenia firmaron un acuerdo para restablecer relaciones diplomáticas y abrir sus fronteras, luego de un siglo de hostilidades debido a las muertes masivas de armenios a manos de las fuerzas turcas otomanas durante la Primera Guerra Mundial.
La ceremonia de firma del acuerdo fue postergada por más de tres horas, obligando a la secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, a intervenir en intensas negociaciones para salvar el acuerdo.