Cuestionan oficina del combate a la delincuencia
“Queremos ayudarlos… venimos a ayudarlos… vamos a compartir oficinas en México de Inteligencia, para combatir el crimen organizado”… Eso dijo la señora Clinton a su llegada a México y agrega que “el 90% de las armas que entran a México pasa por Estados Unidos” y que “la ansiedad y urgencia de los norteamericanos por consumir drogas, provoca este caos social, violencia generalizada y la falta de seguridad no sólo en México sino también en Estados Unidos”.
Lo que no dijo es que ellos, los que gobiernan allende el Bravo, ya tienen gente que comparte oficinas con los mexicanos en el combate a la delincuencia organizada, sobre todo en lo inherente a las drogas y al terrorismo.
La DEA, el FBI y una centena de ex agentes del Mossad y el Shin Bet israelíes, radicados en México, trabajan al servicio de Estados Unidos y de paso a beneficio de Israel, pero jamás a favor de México y es natural entenderlo así por su propia naturaleza, pero el quid de este asunto es que México por conducto de nuestro presidente y sus allegados “especialistas en Inteligencia” están haciendo un papel triste, medroso y cobarde, porque es tal el entreguismo de este régimen y el de Fox incluido que, no les ha hecho falta que los presionen para entregarse a servir a los intereses ajenos antes que los del pueblo mexicano y no sólo en seguridad nacional, política y financiera sino en otros sentidos.
Y sobre esto, en días próximos, podría extenderme un tanto igual o menor que estos puntos de vista en este foro.
Atenta y respetuosamente,
Augusto Hugo Peña D.
Torreón, Coahuila.
Piden semáforos en Calle 12
Urge la instalación de semáforos en los cruces de avenida Escobedo y calle Doce, así como también en avenida Ocampo y calle Doce, somos muchos los que utilizamos estas calles.
Anónimo.
Bulevar Alemán con fallas
El bulevar Miguel Alemán ya presenta fallas a poco tiempo de haber sido estrenado. A la altura del cerro de la antena repetidora, sentido de Gómez a Lerdo, afuera de un bar existe una gran zanja, donde el pavimento se hundió, presentando un gran peligro para todos los que por ahí transitamos.
José Soto Paredes,
Torreón, Coahuila.
