‘Deben operativos ser adecuados’
El viernes pasado asistí a una reunión para despedir a un compañero de trabajo por cambio de plaza.
Al retirarme tomé una calle de la colonia Navarro y de improviso una patrulla de Tránsito y Vialidad me detuvo; solicité al oficial me dijera cuál era el motivo y me indicó que se trataba de un operativo antialcoholismo. Me preguntaron que si había ingerido bebidas y honestamente les respondí que al menos una copa y es la verdad, pues no acostumbro beber.
Me pidieron liciencia, la mostré y me indicaron que tenía que acompañarlos al Ministerio Público para que me hicieran la prueba del alcoholímetro. Definitivamente no estuve de acuerdo ya que no iba en estado de ebriedad.
Mi consideración al respecto es lo siguiente: ¿cómo es posible que en un operativo no estén en algún punto fijo y nada más sea una patrulla?
No puede ser que los oficiales no traigan consigo el alcoholímetro.
Son gente impreparada porque al cuestionarlos por qué no traían el aparato para medir el grado de alcohol, me contestaron que ahora que ganara Olmos le dijéramos que se los proporcionaran.
Yo creo que al cuestionarlos de una manera correcta y al ver que no era lo apropiado hacia mi persona, ya que me identifiqué completamente, ya no supieron qué hacer.
Yo estoy completamente de acuerdo que exista ese tipo de operativos y felicito a las autoridades por implantarlos por el bien de la ciudadanía.
En lo que no estoy de acuerdo es en la forma que lo hacen, tal parece que los agentes más bien estaban buscando la forma que se les diera una “mordida”.
Deberían de hacerlos (los operativos) en puntos fijos como a la salida de la Feria, antros, etc., y dotar al personal con las herramientas necesarias, además de vigilar que se lleve a cabo como debe ser, con el fin de ayudar al ciudadano, no de tratar de extorsionarlo y de aplicar la Ley o reglamento en forma correcta.
Hago un llamado a las autoridades correspondientes para que tomen las medidas necesarias.
Braulio Salazar Adame,
Torreón, Coahuila.