Fariseos se adueñan de México
Templos de la Ley, sedes de legislaturas son convertidos en mercado donde el fariseo hace su agosto a costa del presente y futuro de México y los mexicanos. Estos fariseos conocidos como cabilderos y mercenarios contratistas, en San Lázaro y Xicoténcatl. Cámaras donde representantes del pueblo deben legislar para beneficio de los mexicanos y resguardar seguridad y soberanía de la nación, han sido contaminados por una caterva de cabilderos pillos que hacen que lo pecuniario esté encima de la Ley, la justicia, el bienestar del pueblo, la seguridad nacional y soberanía del país. Han hundido a México a espacios recónditos de corrupción donde el dinero e impunidad van de la mano y brillan cual cuentas de oropel intercambiables por componendas que favorecen a pocos y empobrecen a las mayorías.
¿Cuántos diputados y senadores venden a sus representados por unas cuantas monedas?... ¿Cuántos ni siquiera reciben monedas sino órdenes de jefes de su bancada partidista?... ¿Cuántos votan contra intereses de sus representados para favorecer a ricos empresarios y trasnacionales, razonando apenas su voto e ignorando el daño que perpetran contra los mexicanos, cuando votan por el aumento de impuestos al que menos tiene y ven de soslayo los privilegios de que gozan los ricos con leyes a modo que les permite evadir “dentro de la Ley” el pago de sus contribuciones?... muchos, muchos, tantos como la mayoría en ambas cámaras legislativas. ¡Qué vergüenza!
La práctica de cabildeo tanto entre legisladores como en secretarías del Gobierno y entre ejecutivos de todos niveles, viene de Gran Bretaña y Estados Unidos y, con todo que allá las instituciones valen, cosas graves se deben a esa manera de corromper que aquí por nuestra idiosincrasia llamamos “maicear”. Miles de palestinos han muerto y han perdido sus hogares y tierras porque diputados en Estados Unidos fueron comprados por grupos de poder judíos enclavados en el corazón de Norteamérica y en su política, fuera de justicia y Ley, los hacen funcionar a favor de ladrones, malvados y criminales. En Londres y París, el cabildeo harto en codicia, para hundir a Alemania a la pérdida de la Primera Guerra Mundial, provocó la Segunda Guerra (1939 – 1944) que costó la friolera de 6 millones de judíos y de 59 millones de no-judíos, también inocentes.
En Rusia, familiares de los marineros –ya muertos- que quedaron atrapados en un submarino en el fondo del océano, por medio de sus representantes políticos, obligaron a que el Gobierno pagase lo necesario para rescatarlos y así fue. En México, más de 50 mineros yacen en el fondo de la mina Pasta de Conchos en Coahuila y nadie los rescata porque los patrones Germán Larrea y socios, Alberto Bailleres de Peñoles y Rogelio Montemayor, ex gobernador del Estado, usaron cabilderos (fariseos) para que ese asunto –costoso- no se toque en cámaras, ni en los gobiernos estatal y federal.
Augusto Hugo Peña D.
Torreón, Coahuila.
