Aunque al construirse se cumplió con una obligación ambiental, a 5 años de que entró en operaciones la planta tratadora de aguas residuales de Torreón ha sido un fracaso. No solamente no se vende la totalidad de las aguas grises para usos agrícolas sino que el agua que tiene un segundo tratamiento para riego de áreas verdes y usos industriales, únicamente ha logrado un mercado del 50%.
A causa de esto último, cientos de usuarios del Simas que consumen arriba de 30 metros cúbicos por mes de agua potable, lo mismo que los negocios e industrias, tienen que seguir pagando el concepto de "Saneamiento'', que se dijo sería un cobro temporal mientras se comercializaba el agua tratada.
Actualmente el Simas obtiene mensualmente un ingreso de sólo 500 mil pesos por la venta de aguas grises o para usos agrícolas y por las aguas para usos industriales, únicamente ha logrado ingresar 73 mil pesos al mes.
Vìctor López, secretario del Consejo del Simas, dice que aunque la capacidad de la planta es para tratar mil 900 litros por segundo, la operación actual es de entre mil y mil 250 litros. Alrededor de mil litros por segundo se vende a pequeños propietarios como Marcelo Gómez y Juan José Fernández, el resto se "tira" a La Vega del Caracol donde la "aprovechan" otros productores para el riego de cultivos de alfalfa. Con esta agua se riegan 800 hectáreas de forrajes y el precio de venta de 0.30 centavos por metro cúbico.
Víctor López comenta que no hay fecha próxima para que los ciudadanos cautivos dejen de pagar el saneamiento. No ha crecido la venta de agua para usos industriales, dice, debido a la recesión por la que atraviesan principalmente los sectores industrial y comercial.
