Un escondite (zulo) de la organización terrorista ETA localizado hoy en el sur de Francia, el cuarto hallado en los dos últimas días, albergaba 17 bidones con unos 300 kilos de explosivos, informaron a Efe fuentes de la investigación.
Este último escondite está situado en las proximidades de la localidad de Minerve, en el departamento mediterráneo de Hérault, la misma zona en la que este jueves fue localizado otro zulo con una gran cantidad de material electrónico que hubiera permitido fabricar decenas de bombas-lapa.
Este hallazgo se suma al descubrimiento hoy de otros tres escondites de ETA: uno en la comuna de Ferrals-les-Montagnes, cerca de Vieussan; otro en Herault, y un tercero cuya localización exacta no ha sido facilitada por las fuentes consultadas.
En uno de esos zulos se ha intervenido la bomba-lapa "ya preparada y lista para atentar" y en otro quince revólveres, procedentes del robo de armas cometido en octubre de 2006 en Vauvert, además de cordón detonante, entre otros materiales.
Además, la bomba-lapa tenía un temporizador que permitía programar su explosión con una "gran antelación", como se sospecha que hicieron los terroristas en los atentados perpetrados del pasado día 9 en Mallorca (Islas Baleares), entre ellos el de Calviá, en el que fueron asesinados los guardias civiles Carlos Sáenz de Tejada y Diego Salvá.
Desde que el pasado miércoles fueran detenidos en la región de Saboya los presuntos etarras Alberto Machaín, Aitzol Etxaburu y Andoni Sarasola, considerados los responsables de suministrar armas y explosivos a los comandos de la banda, son ya siete los zulos descubiertos.