Un nueva teoría astronómica sugiere que invasores gélidos provenientes de muy lejos se depositaron en el cinturón mayor de asteroides del sistema solar.
Estos "invasores" son asteroides más parecidos a cometas primigenios congelados que a las rocas "asadas" que componen la mayoría de los asteroides entre Marte y Júpiter.
Una teoría, dada a conocer por científicos en la revista Nature, sugiere que estas rocas gélidas pueden ser consideradas como "contaminación" proveniente de la franja de asteroides Kuiper, más allá de Neptuno.
Cuando Saturno y Júpiter se alejaron del sol hace casi cuatro mil millones de años, la fuerza generada impulsó a los pequeños asteroides a esparcirse. El científico especializado en planetas Hal Levison propone que algunos de ellos se quedaron atrapados junto a los asteroides que flotaban entre Júpiter y Marte, mientras que otros bombardearon la tierra y la luna.