Una de las hijas del líder de Al Qaeda, Osama bin Laden, se refugió en la embajada saudí en Teherán después de escapar de los guardias que la tenían bajo arresto domiciliario a ella y a cinco de sus hermanos desde hace ocho años, informó un diario de propiedad saudí.
Desde hace mucho se tenían versiones de que Irán tenía detenidos a algunos de los hijos de Bin Laden luego de que escaparon de Afganistán tras la invasión de ese país encabezada por Estados Unidos en 2001.
Entre ellos los más conocidos son Saad y Hamza bin Laden, quienes se cree que tenían posiciones de mando dentro de Al Qaeda. Este año, funcionarios estadounidenses dijeron que Saad bin Laden podría haber muerto durante un ataque aéreo en Pakistán, donde habría huido tras ser liberado por los iraníes, pero agregaron que no podían confirmarlo.
Sin embargo, Omar bin Laden, otro de los hermanos, le dijo al diario Asharq Al-Awsat que Eman llamó a familiares desde la embajada y les dijo que Saad, de 29 años y otros cuatro hermanos siguen retenidos en Irán.
Se intentó hablar con Omar, pero no recibió respuesta de inmediato. No hubo declaraciones de funcionarios iraníes ni saudíes.
Asharq Al-Awsat reportó que Eman, de 17 años, se escabulló de los guardias y se dirigió a la embajada saudí hace casi un mes. El encargado de negocios de la embajada, Fouad al-Qassas, confirmó al diario que la joven está ahí hace 25 días y que se estaban haciendo gestiones diplomáticas para que los iraníes la dejaran salir del país.
