Esposa. Una semana después de haber fallecido, fue identificado el quinto presunto secuestrador del poblado Ramón Corona.
Durango
Eva Flores Padrón, de apenas 22 años de edad, pidió ver los cuerpos de las personas que perdieron la vida la semana pasada en un enfrentamiento entre una presunta banda de secuestradores y elementos del Ejército. Reconoció a uno de ellos como su esposo.
IGNORA EN QUÉ TRABAJABA
La viuda se presentó ante el Agente del Ministerio Público la tarde del domingo y solicitó trasladarse a la morgue para ver los cadáveres del enfrentamiento suscitado el 8 de diciembre en el poblado Ramón Corona, pues tenía días de no ver a su esposo. Al ver un cuerpo lo identificó como Juan Francisco Rivas Martínez, también de 22 años de edad, tenía su domicilio junto con Eva en la ciudad de Gómez Palacio.
La esposa manifestó desconocer las actividades a las que se dedicaba Juan Francisco.
AÚN FALTAN CINCO El cuerpo de Juan Francisco ingresó al anfiteatro de la Procuraduría de Justicia Estatal para la práctica de la necropsia de ley el pasado martes y se le relaciona con los hechos de sangre suscitados en el poblado Ramón Corona del municipio de Cuencamé, donde se desplegó un operativo conjunto de más de 200 elementos militares, de la Agencia Estatal de Investigación (AEI) y fuerzas federales, el cual fue repelido a balazos por una presunta banda de secuestradores que operaba en la región.
En la reyerta fallecieron diez presuntos secuestradores, Juan Francisco es apenas el quinto en ser identificado por sus familiares y reclamado ante las autoridades estatales.
Los otros cinco continúan en la morgue del Servicio Médico Forense (Semefo) a espera de que sean reconocidos por sus parientes.
En el operativo fueron liberadas seis personas que permanecían privadas de su libertad.