La oficina del forense del condado de Los Ángeles identificó ayer a seis de las nueve personas asesinadas cuando un hombre disfrazado de Santa Claus atacó a la familia de su ex esposa en vísperas de Navidad.
Bruce Jeffrey Pardo, consternado por su divorcio, hizo numerosos disparos contra los residentes e invitados a una fiesta en la residencia en Covina de su ex esposa y de su familia.
Luego regó la vivienda con combustible, dijeron las autoridades. Pardo se quemó cuando el combustible se inflamó, y luego, se suicidó con su arma de fuego.
El forense, teniente Larry Dietz, dijo ayer que su oficina identificó los cadáveres de los padres de la ex esposa de Pardo: Joseph Ortega de 80 años, residente en Covina, que murió al recibir varios balazos en el estómago, y Alicia Ortega de 70 años, baleada también en el abdomen.
También murieron Teresa Ortega de 51 años, que recibió un balazo en la pierna y falleció posteriormente por quemaduras graves e inhalación de humo; Alicia Ortiz de 46 años, de Upland; Charles Ortega de 50 años, de West Covina, y su esposa, Cheri de 45 años.
Ortiz, Ortega y su esposa, murieron de lesiones múltiples, incluidas quemaduras y heridas de bala, a las que se sumó la inhalación de humo.
Tres cadáveres no han sido identificados aún. La Policía de Covina dijo que hay tres personas que figuran como desaparecidas: la ex esposa de Pardo, Sylvia Pardo de 43 años; James Ortega de 52 años, esposo de Teresa Ortega y Michael Ortiz de 17 años, hija de Alicia Ortiz.
De acuerdo con testigos, Pardo pasó meses planeando su masacre navideña. A mediados de año, Pardo estaba comprando armas y municiones y ordenando suministros para construir un aparato con el fin de incendiar la casa de sus ex suegros. A principios del otoño, el ingeniero eléctrico desempleado compró un traje de Santa Claus extra grande diseñado para él.
