Amy Winehouse aunque posee un gran talento, la cantante ha tenido que enfrentar escándalos y hospitalizaciones por el consumo de sustancias.
Las adicciones no son privativas de algún sector social o clase socioeconómica, prueba de ello es que diversas celebridades han tenido que soportar un "infierno" al ser consumidores habituales de ciertas sustancias.
En días recientes se supo que el actor David Hasselhoff fue hospitalizado por una congestión alcohólica, aunque negó que se tratara de una recaída en el consumo de la sustancia ambriagante.
Él asegura que todo se debió a las reacciones contraproducentes que dos medicamentos tuvieron en su cuerpo, uno de ellos, precisamente, para evitar que consuma alcohol, y es que desde hace años el protagonista de “Guardianes de la Bahía” lucha contra su adicción.
Cabe recordar que hace tiempo fue captado por su propia hija en un video que lo mostraba totalmente ebrio, tirado en el suelo y tratando de comer una hamburguesa.
Otra famosa que vivió el “infierno” de las drogas es Whitney Houston, quien debido a su adicción olvidó su carrera musical varios años.
Apenas ha vuelto a la escena y aunque asegura que aún se siente tentada por las drogas, lucha a diario para vencer los deseos de consumo.
La británica Amy Winehouse es otro ejemplo de cómo las drogas arruinan la carrera de un famoso, pues aunque posee un gran talento, la cantante ha tenido que enfrentar escándalos y hospitalizaciones por el consumo de sustancias.
A quien captaron en una situación no muy favorecedora fue a Max Wright, papá de Alf, pues "desnudaron" sus perversiones en un video en el que aparecía consumiendo drogas y teniendo sexo con vagabundos.
Y si se trata de adicciones también está el caso más reciente del “Rey del Pop”, quien de acuerdo con los reportes que se han tenido tras su muerte, ocurrida el pasado 25 de junio, fue víctima de una sobredosis letal de propofol, sin que se sepa a ciencia cierta quién o cómo se la suministró. El cantante también era adicto a los analgésicos.
