El combate al dengue se dificulta en las colonias conflictivas de Torreón, pues los brigadistas son víctimas de asaltos y agresiones, señaló José Aguirre Carrillo, jefe de la Jurisdicción Sanitaria VI.
“A nuestros brigadistas los han atacado, los han amenazado y asaltado en colonias como Las Luisas y Las Carolinas. Con cuchillo en mano a uno le quisieron quitar la camioneta y a otro le robaron su dinero”, dijo el doctor.
Hace un año, la jurisdicción solicitó el apoyo a la Policía Preventiva de Torreón para fumigar, abatizar y descacharrizar las colonias del poniente: “y nos dijeron que mejor no fuéramos”.
Ante esta situación, el doctor pide la ayuda de la ciudadanía para seguir los consejos para combatir al mosquito transmisor del dengue, Aedes Aegypti, entre ellos: eliminar todos los cacharros de patios y azoteas, así como todo recipiente capaz de contener agua; también es necesario colocar abate en los aires lavados y plantas acuáticas, y fumigar los interiores de las viviendas.
Para combatir al dengue, la jurisdicción contrató a 96 brigadistas y ahora suman 124. “Estamos trabajando con nueve máquinas fumigadoras, antes lo hacíamos con una nada más; el objetivo es reforzar las acciones para evitar los criaderos del mosquito como abatizar, fumigar y descacharrizar las colonias”.
El dengue es una enfermedad infecciosa aguda viral, transmitida por el mosquito Aedes Aegypti, y puede ser clásico, hemorrágico, o síndrome de choque por dengue.
Donde se desarrolla la fase acuática del Aedes Aegypti (mosquito transmisor del dengue) es comúnmente en los llamados criaderos. En su mayoría, son de tipo artificial, producidos por el hombre y ubicados dentro o cerca de las casas.
El funcionario explicó que todo recipiente capaz de contener agua puede transformarse en criadero, y sus características condicionan la presencia permanente o temporal de los mosquitos; su tamaño puede variar, desde la tapa de un envase de refresco, hasta una cisterna; pueden ser artificiales (plástico, metal, madera y cemento) o naturales (como son las axilas de los árboles, plantas o pequeños encharcamientos).
Para combatirlo es necesario abatizar los depósitos de agua, fumigar los interiores de los domicilios y sacar los cacharros.