El paso de David Alfaro Siqueiros por Buenos Aires en la década de 1930 dejó un mural poco conocido que estuvo sumergido en la oscuridad por años, sin que su valor artístico ni el aluvión de pasiones que despertó recibiesen demasiada atención. Esa rica historia saldrá a la luz ahora con su exhibición en público por primera vez y con una película del laureado realizador Héctor Olivera.
La estadía del muralista mexicano marxista en Buenos Aires estuvo rodeada de todo tipo de vicisitudes, incluida una compleja relación con un magnate argentino y una novelesca historia sentimental, que involucra también a Pablo Neruda. Olivera no lo pensó dos veces cuando se enteró de todos los entretelones y decidió hacer una película.
"Son personajes muy atractivos y complejos porque no tienen una línea de conducta coherente", señaló el cineasta argentino en alusión a "El Mural", la cinta protagonizada por el mexicano Bruno Bichir en el papel del famoso muralista y por la argentina Carla Peterson en el de la escritora uruguaya Blanca Luz Brum, esposa del pintor.
El rodaje comenzó hace poco en Buenos Aires y localidades cercanas a la capital, en las que se intenta recrear la Argentina de entreguerras. Siqueiros llegó a principios de los años 30 a Buenos Aires, donde dejó su huella como artista en el sótano de la casona del magnate de la prensa Natalio Botana.
En esa mansión, rodeada por un jardín, pintó "Ejercicio plástico", obra en la que se basa el filme y que después de numerosos avatares y de haber sido casi destruida, será exhibida en Argentina en mayo de 2010.
El mural alrededor del cual gira la trama está considerado por expertos consultados por AP como una pieza extraña en la producción del muralista mexicano. "Es única por su forma semicilíndrica" y por su temática, ya que tradicionalmente Siqueiros pintaba temas políticos y sociales y en este caso "realizó un ejercicio erótico o plástico", señaló a la AP Eduardo Guitima, uno de los especialistas que participaron recientemente en la restauración del mural.
Mientras pintaba el mural, las vidas de Siqueiros y de su esposa se entrecruzaron, en ocasiones de forma atormentada y pasional, no solo con la de Botana sino también con las de su esposa, la anarquista Salvadora Mendina Onrubia; la del poeta chileno Neruda, por entonces vicecónsul en Buenos Aires, y la de la escritora e intelectual Victoria Ocampo, que fue quien invitó a Siqueiros a Buenos Aires para brindar una serie de conferencias.
A excepción de Bichir, el resto de los principales actores son argentinos. Sergio Boris interpreta a Neruda; Luis Machín hace de Botana; Ana Celentano es Salvadora Medina y Mónica Galán encarna a Victoria Ocampo.
"La obra del pintor mexicano es el desencadenante de todo lo que pasa", explicó Olivera.
Siqueiros vino a Buenos Aires con la intención de pintar un gran mural en un silo, pero al ser marxista, se encontró sin apoyo oficial en la Argentina conservadora de la época.
Botana le tendió una mano al ofrecerle que colaborara en su diario "Crítica". También le propuso que pintara una gran obra en su casona Los Granados, situada en las afueras de la capital.
"Supongo que Siqueiros se aferró a la tabla de salvación de Botana porque necesitaba dinero" afirmó Olivera, quien ha dirigido importantes filmes, como "La Patagonia rebelde" y "No habrá más penas ni olvido".
Bichir, que actuó en "El patrullero" y "Extraños", también destaca las contradicciones de un marxista defensor del arte público que termina plasmando su obra en la mansión de un magnate.
"Siqueiros es profundamente atractivo por sus debilidades e incongruencias", dijo a AP.
Pero resaltó que el muralista mexicano "logró una obra innovadora y convocó a pintar junto a él a artistas argentinos a los que invitó a desarrollar una nueva visión del arte".
En la realización de "Ejercicio plástico" participaron pintores locales que alcanzarían renombre como Lino Enea Spilimbergo, Carlos Castagnino, Antonio Berni y el escenógrafo uruguayo Enrique Lázaro.
"La idea es abordar al ser humano y no al ícono. De Siqueiros me atrae su lado creativo, sensible y vanguardista, aunque también fue un hombre duro, disciplinado, de formación militar", explicó Bichir.
El film, a ser estrenado el año que viene, habla de pasiones, traiciones, luchas y debilidades, dijo el actor.
Cuando el pintor acepta la propuesta de Botana, le pide a su esposa, Blanca Luz, que vaya a vivir con él a la mansión del empresario en Buenos Aires. Esta última, una bella escritora izquierdista, se enreda en un amorío con el dueño de "Crítica".
La película muestra los celos de la esposa de Botana y la mala relación que ésta mantiene con sus hijos, así como el romance que Neruda acaba teniendo con Blanca Luz en Los Granados, escenario de todos estos enredos y centro de reunión de intelectuales y artistas.
Blanca Luz también tiene un lado incoherente. "Se casó con un pintor marxista y con el tiempo terminó siendo condecorada por (el dictador) Augusto Pinochet", señaló Olivera, cuyo filme, basado en hechos reales, se permite "licencias cinematográficas".
La vida de Blanca Luz, quien murió en Chile en 1985, es de lo más intensa. Se casó varias veces, fue poetisa, cultivó la pintura y en su militancia política pasó de un extremo ideológico al otro.
"Hay versiones que señalan que Siqueiros pintó esta obra para despedirse de la uruguaya, a la que le unía un amor tormentoso", señaló Guitama.
Al parecer en la obra pintada en las paredes, techo y suelo del sótano el mexicano intentó simular una burbuja en el agua, en la que flotaban sensuales figuras femeninas. Se veían torsos desnudos y ojos escrutadores.
Guitama dijo que algunos expertos creen que la única modelo fue Blanca Luz.
"Pero se puede observar la presencia de otras figuras femeninas de distinta edad. Hay una chica joven y también una niña", señaló el restaurador.
"Cuando salga a la luz y se haga público los especialistas van a poder estudiarlo a fondo", señaló.
El mural se deterioró debido al desinterés de los sucesivos dueños de la casa de Botana, que a finales de los años 80 estaba completamente abandonada e iba a ser rematada, explicó Guitima.
El empresario Héctor Mendizábal decidió armar una sociedad para comprar la casa y rescatar el mural.
Contactó con el restaurador mexicano Manuel Serrano, con el que organizó la delicada extracción del mismo, que desmontado en seis partes, fue guardado en contenedores en un depósito.
"Pero Mendizábal acumuló deudas, se sucedieron complicaciones legales y discusiones sobre la propiedad de la obra", explicó Guitima.
En 2003 el mural fue declarado "bien de interés histórico y artístico" por el gobierno del entonces presidente Néstor Kirchner y en octubre pasado expertos argentinos y mexicanos concluyeron su restauración, tras un acuerdo logrado entre los dos países, lo que permitirá que sea exhibido en Buenos Aires en 2010, cuando se estrenará la película.
Guitima explicó que "Ejercicio plástico" resistió el abandono gracias a la novedosa técnica que aplicó Siqueiros. En las paredes y techo del sótano empleó aerógrafos y pinturas a base de silicatos que crearon el efecto de una superficie vidriada, dura y protectora. En tanto, el suelo es de cemento coloreado.
"Para mí este mural es mágico por todo lo que le ha pasado y por su contenido. Fue creado en un ámbito privado. Muy pocos tuvieron acceso a él. Y luego permaneció mucho tiempo oculto", afirmó.
