El alcalde de Cancún Gregorio Sánchez Martínez, confirmó que fue interrogado este jueves por agentes de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), como parte de las indagatorias sobre la ejecución del general de brigada, Mauro Enrique Tello Quiñones.
"Ya la PGR está cerrando el círculo de las investigaciones y entonces hacía falta mi declaración oficial; acordamos, respetando la investidura del presidente municipal, que no me citarían a la delegación de la PGR, sino que acordamos, de acuerdo a mi agenda, que el Ministerio Publico de la Federación viniera a tomarme la declaración", expresó el edil, luego del encuentro registrado en sus oficinas dentro del Palacio Municipal.
Durante más de hora y media, las preguntas -dijo- giraron en torno a lo sucedió a partir del 2 de febrero pasado, fecha en que Sánchez Martínez presentó a Tello Quiñones como asesor de la presidencia municipal en materia de seguridad pública.
Aquella noche, el general fue levantado, al igual que su asistente, un teniente de infantería y un civil, sobrino del alcalde, y sus cuerpos fueron encontrados al día siguiente cerca de un poblado ubicado en la carretera federal que conduce a Mérida, Yucatán.
Otros cuestionamientos se centraron en el ex secretario de seguridad pública y tránsito, Francisco Velasco Delgado, alias el “Vikingo”, y el ex director de la cárcel de esta ciudad, Marco Antonio Mejía, ambos arraigados por la SIEDO debido a su presunta vinculación con la protección a mafias del crimen organizado que ejecutaron el homicidio de los dos militares y el civil.
"Me preguntaron de todo el tema, desde cómo conocí a Marco Antonio, al `Vikingo´; de cómo llegó el general, cómo lo conocí, hasta cómo me enteré de su muerto", manifestó Gregorio Sánchez al término de su interrogatorio oficial.
