El presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Guillermo Ortiz Mayagoitia, acompañado del titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Eduardo Medina-Mora, pone en marcha seis juzgados “virtuales” que podrán girar órdenes de arraigo, de cateos y de intervención de comunicaciones, por medio de Internet. (El Universal)
Pide el procurador Medina-Mora combatir la filtración de información.
Los seis nuevos juzgados “virtuales” que comenzaron a operar ayer, y que se encargarán de girar ordenes de arraigo, de cateos y de intervención de comunicaciones, por medio de Internet, no tienen el objetivo de que haya más convictos, sino el de elevar la seguridad y combatir a una delincuencia cada vez más desafiante, y a la impunidad que la alienta, aseguró el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Guillermo Ortiz Mayagoitia.
Durante la puesta en marcha de los nuevos juzgados, el procurador General de la República, Eduardo Medina-Mora, calificó de segura esta nueva herramienta, pero, dijo, es imprecindible evitar que se den filtraciones tanto de las peticiones que reciban los jueces como de las órdenes que ellos mismos emitan.
Ante los jueces encargados de la nueva tarea y de los consejeros de la Judicatura Federal, que son quienes se encargan de administrar y vigilar a todos los juzgados y tribunales del país, Medina-Mora advirtió que “la filtración de la información contenida en las órdenes de cateo, de arraigo y de intervención de comunicaciones, no sólo pone en riesgo las investigaciones respectivas, sino que además pone en peligro la vida e integridad física de servidores públicos honestos y comprometidos con la consolidación del Estado de Derecho y la seguridad de todos los mexicanos”.
En respuesta a este comentario, en una entrevista posterior el consejero de la Judicatura Federal, Luis María Aguilar dijo que el riesgo de fuga de información en torno a los casos más relevantes se reducirá al mínimo con el nuevo sistema, porque la información dejará de pasar por muchas manos, dado que el nuevo procedimiento hará más directa la comunicación entre la PGR y los jueces, y sólo un reducido número de personas tendrá acceso a los expedientes electrónicos.
