PODEROSO CABALLERO...
Una de las dirigencias más serias del futbol mexicano, la del Santos Laguna, ha anunciado que rompió las negociaciones con el delantero argentino, naturalizado mexicano Vicente Matías Vuoso, por lo que queda en libertad para buscar acomodo en otro club.
La oferta económica, a decir de los de la Comarca, convertiría al romperredes en uno de los jugadores mejor pagados en el Continente Americano y pese a ello, sus representantes y el ariete decidieron rechazarla.
La fidelidad a los colores no suele ser moneda de curso corriente en nuestros tiempos y el atleta busca, dada la cortedad de su carrera, asegurar el futuro lo más pronto posible. El mismo Matías ya había emigrado de la "ciudad de los esfuerzos" a la Capital, donde su paso por el América resultó un rotundo fracaso, aunque seguramente engrosó la chequera del delantero tricolor.
Por eso, llama cada vez más la atención el caso de Federico Vilar y el Atlante. El extraordinario guardameta había recibido una jugosa oferta para vestir la casaca del Cruz Azul, sin embargo el amor a los colores azulgrana y la tranquilidad de su familia pudieron más que un puñado de billetes y se quedó en Cancún, sacrificando la parte económica.
Cada vez es más raro que un jugador haga huesos viejos en algún equipo. Quizá el referente mundial que mejor se adecua al concepto del amor por una camiseta sea el del recién retirado Paolo Maldini, quien jugó toda su carrera enfundado en la casaca del Milán.
El caso de Vuoso por supuesto que no es único ni será el último pero llama la atención por la generosidad de la oferta y el talante del jugador, quien probablemente emigre al extranjero para ni siquiera alinear en su nuevo club. Como escribiera don Francisco de Quevedo: "Poderoso caballero es don dinero".