Estoy maravillada con la investigación de grandes hombres respecto a los espárragos y cómo disuelven cálculos renales y curan el cáncer.
Primer caso.- Un hombre con la desesperante enfermedad de Hodgkins (cáncer de las glándulas linfáticas). Al año de empezar con la terapia de los espárragos, sus médicos no podían detectar ninguna señal de cáncer y había vuelto a practicar ejercicios extenuantes.
Segundo caso.- Un exitoso comerciante de 68 años sufría de cáncer de la vejiga desde hacía 16 años. Después de años de tratamientos médicos, que incluían radiación sin obtener ninguna mejoría, optó por los espárragos. En tres meses los exámenes revelaron que el tumor de la vejiga había desaparecido y los riñones estaban normales.
Tercer caso.- Un hombre tenía cáncer en el pulmón. El cinco de marzo de 1971 lo operaron y encontraron cáncer de pulmón tan propagado que no era operable. El cirujano lo cerró y declaró el caso incurable. El cinco de abril el paciente supo de la terapia de espárragos e inmediatamente la asumió. En agosto los rayos X revelaron que todos los signos de cáncer habían desaparecido. Está de vuelta en su rutina comercial.
(Compárelo con Testimonios de cáncer de pulmón curados o mejorados gracias al aceite de lino y la ricota con la dieta de la doctora Johanna Budwig).
Cuarto caso.- Una mujer que por años tuvo problemas de cáncer de piel. Finalmente había desarrollado diferentes cánceres de piel diagnosticados avanzados por un especialista de piel. A los tres meses de empezar con los espárragos, dijo el especialista que tenía bien la piel, sin ninguna lesión cutánea. La mujer informó que la terapia de los espárragos también le había curado la enfermedad que tenía en los riñones desde 1949. Había tenido 10 operaciones para sacarle los cálculos del riñón, recibía del Gobierno pagos por incapacidad a causa de su estado inoperable, terminal. Ella reconocía enteramente que la cura se debía a los espárragos. No me sorprendió este resultado.
El estudio "Los elementos de material médica", editado en 1854 por un profesor de la Universidad de Pensilvania, declara que los espárragos se utilizaban como un remedio popular para los cálculos de riñón. Este profesor en 1739 se refirió a experimentos en el poder de los espárragos para disolver cálculos.
"Hay muchos otros casos, pero el establecimiento médico interfiere en que obtengamos los registros. Por lo tanto, hago un llamado a los lectores para divulgar estas buenas noticias y ayudarnos a coleccionar un gran número de casos que abrumen a los médicos escépticos sobre este remedio natural e increíblemente sencillo.
"Para el tratamiento los espárragos se deben cocinar antes de consumir; de ahí que los espárragos enlatados son tan buenos como los frescos.
"Me escribo con dos enlatadoras de espárragos, Giant Giant y Stokely, y estoy satisfecho que estas marcas no contienen pesticidas ni conservantes.
"Pongan los espárragos cocidos en una licuadora y logren un puré, almacénelos en el refrigerador. Dele al paciente cuatro cucharadas llenas al día, de mañana y de noche. Generalmente en dos o cuatro semanas los pacientes tendrán reacciones positivas. Se puede diluir en agua y tomarlo como una bebida fría o caliente. La dosis sugerida se basa en experiencia pasada, pero ciertamente dosis mayores no causarán daño y en algunos casos pueden ser necesarias. Yo hice un estudio extensivo de todos los aspectos del cáncer y de todas las curas propuestas. El resultado: estoy convencida que los espárragos constituyen la teoría última y mayor para el cáncer.
"Los espárragos contienen una buena provisión de proteína llamada histones, que se cree activan el control del crecimiento de las células. Por esa razón creo que los espárragos contienen una sustancia a la que llamo normalizador del crecimiento celular. Esto explica la acción en el cáncer y como tónico corporal en general. De todos modos, los espárragos utilizados como lo sugiero son una sustancia inocua. El FDA no puede prevenirte de su uso y te puede hacer mucho bien". Leonard (leonardleonard1 en earthlink.net) agrega: "Hay muchos informes de recuperación tanto por consumir espárragos crudos como cocidos". Houston escribió que "el jugo crudo o licuado puede ser una forma más efectiva" (citado en Hess, 1999, Pág. 138). "Si yo tuviera cáncer comería tantos espárragos como pudiera, cocinados (preferiblemente al vapor) o crudos, sólidos o líquidos".
Los espárragos están repletos de nutrientes y bajos en calorías, sodio y colesterol. Es una fuente excelente de ácido fólico y de vitamina C, tiamina, y vitamina B6. Los espárragos no contienen grasa ni colesterol. Es una fuente importante de potasio y muchos micronutrientes. De acuerdo al Instituto Nacional de Cáncer, los espárragos son el alimento más elevado en glutathione, uno de los enemigos más potentes contra el cáncer citado como "el más potente anticancerígeno y antioxidante". Además, los espárragos contienen rutín en grado elevado, que fortalece los vasos sanguíneos.
Hasta la próxima...