La Columna de Rosell
En medio del coraje, la frustración y ya de plano la vergüenza con nuestra Selección Nacional de Futbol, nos queda el único consuelo posible el increíble sistema de calificación de Concacaf, en estos momentos México esta a dos puntos de ir directo a Sudáfrica, por más que el Tri haga todo lo necesario para no merecer un lugar en una Copa del Mundo el sistema de calificación todavía nos alcanza para asistir ¿a que? eso es otra cosa.
Mañana en el Azteca el equipo que dirige la dupla Carrillo-Aguirre enfrentará a "su similar" de Trinidad y Tobago, se supone que se debe de ganar ya que nuestros seleccionados son como esos chavos de barrio que en su territorio nadie les tose, pero nada mas es cuestión de viajar unos cuantos kilómetros para que les de frio y les tiemblen las patitas a los "ratones verdes" como los bautizo el implacable de Don Manuel Seyde columnista legendario del diario Excélsior que dirigía Julio Scherer.
La bipolaridad de nuestra Selección no es cosa nueva, así ha sido a lo largo de la historia y en cuanto en caso de calificar ¿para que se asistiría?, creo que también la historia nos ha enseñado que el desempeño de los verdes ya en la justa mundial nada tiene que ver con las miserias demostradas en la eliminatoria previa. Se juega por momentos bien y se termina como siempre cayendo con cierta dignidad en el primer juego de la segunda fase.
La ira no es buena compañera, se entienden las demostraciones de ¡Que se vayan todo al carajo! pero francamente, e incluso me dirijo a los mas enojados, ¿les gustaría que México mantuviera el lugar donde se encuentra y por lo tanto quedara eliminado del Mundial? Piénsenlo, cuenten hasta 10 y finalmente se darán cuenta que siempre será mejor estar en la Copa.
Seguimos sosteniendo que se va a calificar, el Hexagonal pasado se quedó en segundo, en este creemos que lo mas probable que ocupemos la tercera plaza, por eso aquello del titulo de esta columneja, equipo de tercera plaza, delante de nosotros: gringos y ticos, pero el tercer escalón te califica directo al Mundial, se descenderá un lugar pero todavía en zona de calificación directa, si esto sigue así (y no se ve por donde vaya a cambiar para bien) para el Mundial de Brasil ahora sí se correrá un riesgo grande de quedar marginados.
Tres lugares y medio para la calificación más el Estadio Azteca nos blindan de el gran cúmulo de estupideces cometidas a lo largo de nuestra futbolística historia. Un ejemplo de estupidez es la convocatoria de jugadores en convalecencia o con muy pocos, o de plano ningún minuto jugado al máximo nivel en todo el año 2009 como El Conejo, Osorio, Guardado, Moreno, Castillo, Franco, etcétera. Convocar al "Venado" Medina además de cruel es inexplicable, el muchacho a duras penas lucha por un puesto de titular en un equipo plagado de jovencitos. Para no vernos localistas y laguneros, no pedimos la titularidad de Vuoso, pero por el amor de Dios ¿no merece más la convocatoria que la intrascendencia convertida en jugador que es Alberto Medina?
Otro punto, si ya te diste cuenta lo que significa un jugador pensante como Blanco, me imagino que te estarás dando de golpes contra la pared por no llamar a Zinha, imagínate al Temo y a Zinha que hablan el mismo idioma crear jugadas de gol que tanto escasean y se cuentan con los dedos de la mano. las generadas en tres juegos de visita, te juro y no creo exagerar, en 270 minutos en tres juegos de visita son, si mucho, cuatro llegadas mas o menos claras de gol, simplemente de vergüenza absoluta.
Javier Aguirre lo primero que hizo fue hablar fuerte con sus seleccionados y les pidió encarecidamente e incluso con riesgo de castigos fuertes que se cuidaran de las tarjetas "innecesarias" como si el jugador fuera el que determine cuales son esas, resultado: le quitan su principal arma a alguien como Torrado, eso sí, le das el gafete de Capitán y le dices que se mate en la cancha pero que si lo amonestan o expulsan no se la va a acabar. ¿En qué cabeza cabe limitar a jugadores como Pavel y Torrado a la hora de meter la pierna?, igual los dos fueron amonestados y no podrán jugar mañana en el Azteca, pero si los hubieras liberado, por ejemplo el primer gol del Salvador, Zelaya que fue el que creo la jugada no hubiera pasado con tanta facilidad a Torrado, Gerardo simplemente lo hubiera sembrado con la consiguiente tarjeta esto ni duda cabe pero Zelaya no hubiera pasado así de simple, si convocas a jugadores debes de correr los riesgos que esto lleva, de lo contrario mejor ni le hables.
Las cosas en Concacaf cambian con exasperante lentitud y que bueno, mientras los rivales de México no superan el miedo escénico al Azteca vamos de gane, Dios nos libre cuando lo superen y vengan a jugar como lo hacen de locales, afortunadamente eso todavía no sucederá esta eliminatoria, ya nos dio el ejemplo Costa Rica flamante líder del hexagonal que simplemente naufragó de fea manera en el Coloso. Seguiremos haciendo corajes, seguiremos mentando madres esto ya es parte de nuestra Selección, pero al final de cuentas todos estaremos pendientes de lo que haga (lo menos) o lo que deje de hacer (lo mas) y que nos sirvan la otra compadre.