Para la elaboración de queso artesanal, es elemental la leche, pero en ocasiones ésta no es pasteurizada, lo que implica un riesgo para la salud, según indicó Patricia Herrera Gutiérrez, secretaria de Salud.
El proceso de eliminar las impurezas y microorganismos que contiene la “leche bronca”, como se le conoce comúnmente, puede ser causante de enfermedades como brucelosis, que, aunque no causa fatalidad, sí es incapacitante y limitante para quien la llega a padecer.
Por eso cabe puntualizar que para iniciar el proceso de pasteurización de la leche, es necesario someterla a calentamiento lento de 63 grados por media hora o bien con tiempo rápido durante 15 segundos a una temperatura por encima de los 72 grados.
La funcionaria recomendó que es necesario asegurarse de que la la leche proviene de animales sanos.