Nacional Claudia Sheinbaum Seguridad Narcotráfico Generación Z Pensión Bienestar

La gratitud

El Filósofo de Güémez

RAMÓN DURÓN RUIZ

Cada que me lee, mi corazón se llena de agradecimiento hacia usted, cuántas veces, por creernos "el último refresco en el desierto", olvidamos dar las gracias, son muchas las cosas por las que podemos dar gracias a Dios, pero nuestra vida transcurre en un lamento perpetuo por aquellas que anhelamos, ignorando que quejarnos es la manera más simple de debilitar los dones que la vida nos ha entregado, pareciese que tenemos una atracción natural para quejarnos en lugar de tenerla para dar las gracias.

Aquellas personas que se han encontrado con fuertes retos y pruebas, como el sufrimiento, la enfermedad y la muerte de un ser querido, tienen un punto de referencia distinto. No se preocupan por las insignificancias, y sienten especial gratitud por los más pequeños favores y bendiciones. Cuando la vida nos sonríe, cuántas veces postergamos dar las gracias, olvidando que cuando vamos con un "gracias" por la vida, con un "gracias" en el corazón, con un "gracias" en la mente y en los labios, todo miedo al que hayamos estado aferrados debilitando nuestras potencialidades, sea cual sea, desaparece y reaparece la pureza del amor.

Es innecesario buscar la gratitud en el universo, si no está dentro de uno mismo, jamás la encontraremos. La gratitud no depende de lo que pase en el mundo

Con mucho acierto Louise L. Hay, autora de Tú puedes sanar tu vida; tú puedes sanar tu cuerpo, dice: "Una actitud de agradecimiento tiene el poder de convertir las dificultades en oportunidades y los problemas en soluciones".

Por su parte, David Yonggi Cho nos dice:

1. Dar las gracias honra a Dios.

2. Dar las gracias trae bendiciones.

3. Dar las gracias trae gozo y felicidad.

4. Dar las gracias trae sanidad interior.

5. Dar las gracias nos ayuda a experimentar milagros y a superar dificultades.

La gratitud es una virtud que se cultiva con la práctica, es una excelente manera de dejar de concentrarse en los problemas, en las cosas negativas y fijar la atención en lo que está bien. El agradecimiento hace sonreír, llena de gozo e inunda de amor el corazón. Cuanta más gratitud sintamos por lo realizado y por lo que falta por hacer, más armonizados estaremos con el universo. La gratitud es una virtud que puede contribuir de forma ilimitada en nuestra felicidad, porque es un aspecto esencial del amor. Una excelente manera de hacer especial cada momento de nuestra vida es expresar gratitud por todo lo que ocurre en el mundo.

La vida es un regalo y la gratitud nutre nuestro corazón, nos ayuda a trascender e intensificar nuestra potencialidad de vida. Agradezcamos este regalo y usémoslo para sanar nuestra vida, dar las gracias incluso antes de recibir, eso es lo que crea los milagros con los que nos sorprende el universo. La gratitud es la respuesta emocional llena de la vitalidad del amor, que surge en nuestro interior cuando nos encontramos ante el imponente diseño de la vida, es una actitud que nace del corazón en aprecio a reconocer los dones que poseemos.

La gratitud es un acceso a la conciencia, y la conciencia es una puerta hacia al amor eterno que fluye permanentemente. La gratitud no tiene límites: con su magia de vida tiene la virtud de despertar tu alma adormecida, haciendo de ti un ser pleno y diferente.

Lo anterior me recuerda la ocasión aquélla en la que Fibrionio llega con el Filósofo:

--Filósofo, estoy muy agradecido contigo, los consejos que me das siempre me funcionan, ahora necesito que me digas ¿cómo le hago para enseñar a nadar a una joven?

--Mira, eso es muy sencillo -respondió el Filósofo-

--¡No, Filósofo...!, ¡es que la muchacha es mi hermana!

--¡Ah! -dijo el Filósofo-, entonces la cosa es más sencilla, dale un empujón y que se las arregle sola.

Leer más de Nacional

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Nacional

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 438619

elsiglo.mx