El Siglo de Durango
Cuencamé, Dgo.
La fuerte ola de violencia por la que atraviesa el estado perjudica en gran medida al municipio de Cuencamé, al ser uno de los más inseguros debido a los múltiples “levantones” que se han suscitado desde hace varios meses. Esta vez los jóvenes fueron los más perjudicados, ya que no pudieron asistir a la Pascua Juvenil por la inseguridad que prevale en el lugar.
temor
La coordinadora de la Pascua Juvenil, Sandra Lilia Rodríguez Alvarado, dijo que por la inseguridad, la violencia y los secuestros, los sacerdotes de las iglesias de Santa Clara, Peñón Blanco, Nazas y Velardeña decidieron no enviar a sus jóvenes, lo que habría sido una multitudinaria reunión de mas de 500 participantes.
“El encierro” de la Pascua Juvenil, que reunió a más de 80 jóvenes pertenecientes a la iglesia de San Antonio de Padua, se efectuó en el Auditorio Municipal, luego de que por espacio de cuatro días los participantes en sus principales actividades desarrollaron el Viacrucis. El objetivo, dijo Sandra Lilia Rodríguez Alvarado, coordinadora del evento, es hacer que los jóvenes acepten la presencia de Cristo, que reaviven los días santos, “les damos explicación de lo sucedido en estos días de aquella época; también tocamos diferentes temas, el último de ellos fue el de la familia. El domingo, que es cuando iniciamos, efectúan los jóvenes la procesión del Domingo de Ramos; emulamos la entrada de Jesús a Jerusalén. Y el lunes recrean los temas del día como el amor, la eucaristía y el sacerdocio. Se hace también el Lavatorio de Pies como lo hizo Jesús con los apóstoles. El martes desarrollan el Viacrucis; del Viernes Santo donde se conmemora la muerte de Cristo, la adoración de la cruz y la Marcha del Silencio por algunas calles de Cuencamé. También festejamos la resurrección de Cristo; hacemos que el joven tenga una experiencia como ser mejor persona. Festejamos que Él está vivo con nosotros en nuestro corazón y lo disfrutan con enorme gozo”.