Entre las enfermedades que provocan el aborto en las cabras, se debe de considerar a la Toxoplasmosis, la cual es causada por un protozoario diminuto, parecido a la coccidia, el cual es el Toxoplasma gondii, su ciclo biológico es indirecto, sus hospedadores definitivos son los gatos, los cuales al convivir con otros animales y el hombre, juegan un papel importante en la transmisión de la toxoplasmosis a los hospedadores intermediarios. Entre los cuales se encuentran las cabras. Ya que los gatos son los únicos hospederos que pueden diseminar los quistes del protozoario en sus heces.
Aunque hasta el momento no se ha precisado claramente la fuente contaminante para las cabras, se sabe que convive con ellas, en varios establos, en un momento dado puede eliminar hasta un millón de ooquistes que contaminan el alimento, agua y alojamiento de los animales, y al ingerirlos adquieren la enfermedad.
La infección durante el primer o segundo mes de gestación puede resultar en muerte fetal y reabsorción. La adquisición posterior del parásito provoca aborto en el último tercio de la gestación, mortinatos o nacimiento de cabritos aparentemente normales, los cuales presentan incoordinación muscular, además de debilidad y no pueden caminar ni mamar, por lo cual mueren de inanición en dos o tres días.
Existe una relación entre el título de anticuerpos y las manifestaciones clínicas de la enfermedad; a mayor título de anticuerpos, será más agudo el cuadro. En general se considera que aquellas hembras con altos títulos de anticuerpos tienen más riesgo de abortar. Los anticuerpos transferidos por la madre a través del calostro hacia el cabrito, tienen una duración aproximada de tres meses.
Para el diagnóstico se debe de hacer hemoaglutinación pasiva y/o inmunofluorecencia indirecta.
El diagnóstico del aborto toxoplásmico debe de incluir la observación de las lesiones de la placenta y la demostración del parásito. Para el examen macroscópico la placenta se lava varias veces con una solución salina. Si la necrosis de la placenta se localiza sólo en los cotiledones, entonces se debe a esta enfermedad. Si las regiones intercotiledonarias están afectadas, entonces se trata de una infección por Brucella o Chlamydia.
Para el tratamiento, han respondido aceptablemente las sulfas.
Para el control se debe de restringir la relación del gato con las cabras, impidiendo el acceso a los alojamientos de las cabras así como a sus alimentos. Sólo que quieran lo suficiente a sus gatos y se les permita la convivencia con las cabras en el establo, se les deben de practicar periódicamente muestreos de heces y sangre.
