Los diputados locales y todos los ayuntamientos votaron por un "blindaje" contra el aborto y la eutanasia, pero ninguno se acercó a los enfermos terminales ni a sus familias para pedir su opinión.
María Antonieta Pulido Gurrola, directora del Instituto de Tanatología y Prevención del Suicidio, AC, dijo que no hubo una sola persona del Congreso del Estado que se acercara y que solicitara la opinión de dicha asociación, que se encarga de brindar asesoría a las personas que tienen alguna enfermedad terminal para encarar la muerte inminente, a los familiares de suicidas y a familias personas asesinadas.
"Hablar de este tema es bastante difícil porque las personas no se pueden ubicar en el dolor que siente un enfermo terminal", dijo Pulido Gurrola. Advirtió que una persona que está completamente sana no puede entender lo que siente un enfermo que sabe que va a morir.
"Lo ideal era que se acercaran a ver la otra parte, porque yo detrás de un escritorio puedo decir que no (a la eutanasia), porque no me conviene por muchos factores; sin embargo, habría que ver lo que siente un enfermo terminal y la familia", manifestó María Antonieta Pulido.
En el estado de Durango solamente hay un caso registrado de un enfermo que pide la eutanasia, sin embargo ante la prohibición de esta medida en México la directora del Instituto de Tanatología y Prevención del Suicidio urgió sobre la necesidad de crear una casa para enfermos terminales.
Dijo que ya hay instituciones interesadas en reunirse con familiares de enfermos terminales, para fundar una casa en la que se dé atención especial a los enfermos terminales donde les preparen los alimentos que se les antojen, que no haya restricción en horas de visitas, puedan salir y entrar a la hora que quieran a las áreas verdes.
Sin embargo, resaltó que México aún no está preparado para implementar la eutanasia por los altos niveles de corrupción que hay.