A pesar de que José Ángel Flores aceptó cometer el fraude por 108 mil 50 pesos en contra de la empresa “Súper Boletos”, el día que fue remitido al agente del Ministerio Público salió libre debido a que le otorgaron el perdón.
Se arreglaron
José Ángel realizó cuatro transacciones vía Internet. En la primera adquirió 8 boletos, en la segunda 26, en la tercera y cuarta 14, cada uno con un valor de mil 600 pesos.
El movimiento lo realizó con el número de una tarjeta que apareció en una página de Internet como muestra y utilizó el nombre de “Elva Fávela” como titular de la cuenta, alegó que es su mamá.
El joven fue a Casa Arias del bulevar Miguel Alemán, de Gómez, a recoger los boletos. Como no llevaba la tarjeta, le ofreció al cajero boletos a cambio de que se los facilitara.
Malas compañías
Raymundo Hidrogo Bravo acompañaba a Ángel, pero desconocía en qué andaba metido. Se le hizo raro que Ángel vendiera los boletos de mil 600 pesos en mil pesos, pero no cuestionó. Cuando los policías detuvieron a los jóvenes, Yussef, hermano de Raymundo, preguntó el porqué de la detención, también fue arrestado.