Setenta fotografías del mexicano Juan Rulfo se exhiben desde hoy en Lisboa como una muestra de la mirada social, a veces sutil y otras profunda, de uno de los escritores latinoamericanos más importantes del siglo pasado.
Rulfo (1918-1986) ha pasado a la historia de la literatura como uno de los mejores exponentes del movimiento "realismo mágico", pero el gran público desconoce su vertiente fotográfica, explicó ayer Víctor Jiménez, comisario de la muestra, que acoge el Instituto Cervantes de Lisboa hasta el próximo 3 de diciembre.
"Se ha extendido la idea que Rulfo fue primero escritor y luego se dedicó a la fotografía. Eso es falso", apuntó Jiménez, quien aclaró que su carrera como escritor fue paralela a la de fotógrafo y recordó que, a pesar de ser trabajos distintos, ambas facetas tenían "una sensibilidad común".
El autor de El llano en llamas y Pedro Páramo fue artífice de trabajadas imágenes metafóricas, caracterizadas por un delicado componente estético y un claro compromiso social que conseguía por su vasto conocimiento de la historia de México, señaló el comisario.
Las piezas, de grandes dimensiones, retratan en blanco y negro la arquitectura mexicana, sobre todo de edificios antiguos, y las comunidades indígenas que suelen aparecer en actitud de "resistencia". "Sus imágenes estudian en serio los planos, son de alguien que conoce su oficio, con una visión muy crítica".
