Carlos Bibiano Villa Castillo. CORTESÍA VANGUARDIA
El general retirado del Ejército, Carlos Bibiano Villa Castillo, será el próximo director de Seguridad Pública Municipal, es la primera vez que un militar de alto rango maneje la Policía de la ciudad.
El alcalde electo, Eduardo Olmos, anunció ayer la designación de Villa Castillo, quien fue director de Seguridad Pública de Parras. El militar reemplazará a Karlo Castillo Gracia, quien regresa a la Policía Federal.
Con la llegada de Villa Castillo a la DSPM, las policías de los principales municipios de Coahuila quedarán en manos de militares retirados, que empezaron a tomar las riendas desde principios de año.
Militares dirigen las policías de Saltillo, Ramos Arizpe, Monclova, Piedras Negras, Acuña, Sabinas, Frontera, Castaños y Parras. Además, el general retirado Juan José Castilla es el director de Investigaciones de la Fiscalía General del Estado.
Fuentes del Gobierno del Estado indicaron que militares retirados también podrían llegar a dirigir las policías en los municipios de Matamoros, Madero y San Pedro.
Militares retirados también han dirigido las policías de Gómez Palacio y Lerdo.
Villa Castillo llegó a Parras en julio de 2009, en sustitución de un teniente coronel de la Fuerza Aérea, y renunció el pasado 12 de diciembre.
Durante 43 años en el Ejército, Villa Castillo se especializó en electrónica y comunicaciones. En 2001, siendo teniente coronel, fue asignado a la Procuraduría General de la República, como coordinador de Informática y Telecomunicaciones donde lanzó el sistema de identificación de huellas dactilares.
Villa Castillo ascendió a General Brigadier hasta su retiro a principios de año.
Luego de su llegada a Parras, tuvo roces con regidores, quienes lo acusaron de amenazas, lo cual negó el jefe policiaco.
En Parras, Villa Castillo se destacó por denunciar irregularidades en la dependencia, depurar personal y aportar equipo de radio de su propiedad para que los policías estuvieran comunicados.
Pero la llegada de militares a las policías de Coahuila ha sido acompañada por episodios violentos. Durante el año dos de estos jefes policiacos sufrieron ataques por parte de grupos armados.
En abril, un comando asesinó al coronel Arturo Navarro, que tenía apenas 18 días de asumir el mando de seguridad pública. Navarro fue relevado por otro militar, el General Francisco Castillo, que renunció hace unos días y será sustituido por otro militar.
En agosto, el jefe de la policía de Monclova, General Juan Carlos Pacheco, fue emboscado por sujetos armados. Pacheco salió ileso, pero tres de sus escoltas murieron.
