Llegó la hora de la revancha
TORREÓN, COAH.- Una cuenta está pendiente. La afición lo demanda y ahora será Bueno y su gente los encargados de brindar alegrías en la cancha. El Apertura 2009 es la oportunidad para olvidar el gris torneo anterior
todo para ‘el científico’
Carlos Quintero mostró cualidades, pero no covenció. Ahora, ante la ausencia del ecuatoriano Christian Benítez, el camino se le abre. Ya no hay pretextos. La bola rodará a su favor. Tiene velocidad y técnica, falta ver si sabe cuándo soltar el balón o cuándo efectuar un disparo.
Además del colombiano llega Carlos Ochoa, quien ha pasado por “mil” equipos y en ninguno termina de cuajar. En ratos, Ochoa muestra su valía, en otros se le olvida. Él supo lo que era entrenar en Santa Rita antes de ser guerrero. El primero de mayo de 2006 Ochoa trotó en La Laguna bajo las órdenes de Luis Fernando Tena, cuando militaba en Jaguares. En ese torneo los chiapanecos terminaron aquí la temporada regular y entrenaron para su partido de cuartos de final ante Chivas, a media semana en el Estadio Jalisco. Ochoa repartió autógrafos a la afición de la Comarca. Se le veía contento. Hoy la oportunidad le ha llegado y a sus 31 años no debe desaprovecharla.
Para el técnico Sergio Bueno, lo que viene tiene que ser definitivo. La afición exige entrega. Y Oswaldo Sánchez ya lo dijo en estas páginas: “no entrar a la liguilla y no aspirar a ser campeón sería un fracaso”.
El paquete es grande para el entrenador. La “hinchada” se acostumbró a tener un equipo protagonista y los números de Bueno son pobres: de 11 torneos en Primera sólo en tres ha tenido una productividad arriba del 50%.
La cuarta estrella en el escudo es la meta; porque para escribir la historia hay que ser un triunfador.
Poco a poco el Estadio Corona se va apagando
Torreón, coah.- El 16 de octubre de 1988 se jugó el primer partido en Primera División del Santos en el Estadio Corona.
Hoy esa historia comienza a extinguirse. En teoría, el último encuentro que albergue la “Casa del dolor ajeno” sería el primero de noviembre ante el actual campeón, Pumas de la UNAM, en la jornada 14.
Se trata de la historia de un inmueble chico e incómodo pero que guarda recuerdos para jugadores, técnicos, directiva, afición y tantas personas que se mueven a su alrededor.
Escenario donde se consiguieron los tres campeonatos para los Guerreros (Invierno 1996, Verano 2001 y Clausura 2008), cómplice de locuras pintadas de verde y blanco.
El primer gol anotado en el Corona fue obra de Lucas Ochoa, en el empate a un gol entre Santos y Morelia. A la siguiente semana llegó el primer triungo, el 23 de octubre de 1988, ante los Tigres.
Se va cerrando el telón, y cada minuto que pase será parte de la inevitable cuenta regresiva.
