Lanzadas las campanas al vuelo por el presidente Felipe Calderón ante lo que ubica como freno en la caída libre del empleo en el país, tras registrarse dos meses consecutivos de saldos positivos, lo cierto es que remontar la montaña llevará aún varios años
De entrada, las 32 mil nuevas plazas creadas entre junio y julio -19 mil en el primero; 13 mil en el segundo-, parecieran nimias frente a las 840 mil perdidas a partir de octubre del año pasado.
En paralelo, a contrapelo del lema de campaña que ubicaba al ejecutivo como presidente del empleo, el actual gobierno arrastra un déficit de empleos formales de un millón 552 mil, considerando el crecimiento de la población en edad de trabajar y la pérdida de plazas en 2008.
Estamos hablando de no haberse creado los 868 mil puestos reclamados por el crecimiento de la población económicamente activa y la pérdida de 634 mil plazas.
Más allá, el periodo panista en el poder, es decir, el gobierno foxista y la actual administración, arrastraban hasta el año pasado un faltante de 4 millones 333 mil plazas laborales.
Del año 2000 a 2008 el empleo formal se incrementó sólo en 10.27%, equivalente a un millón 570 mil plazas, en tanto la PEA creció en 14.84%, equivalente a 5.9 millones.
Como lee usted, pues, la cuesta está más que empinada.
Si nos vamos hacia atrás, a partir de 1993, en que se inició la inercia del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), y hasta 2008, la población del país creció en 21 millones 716 mil personas, en tanto la población económicamente activa lo hizo en 11 millones 880 mil.
El caso es que sólo se crearon cuatro millones 96 mil empleos, lo que nos llevó a un déficit de 7.78 millones, equivalente a 65.51% de los puestos reclamados. El 80% de dichos empleos, a contrapelo del objetivo del acuerdo mercantil, lo absorbió la economía informal, en una explosión sin precedente en la historia reciente del país. Naturalmente, el sobrepeso le abrió la puerta a un éxodo de trabajadores migrantes hacia Estados Unidos o Canadá.
Ahora que entre 1993 y el año 2000 los empleos formales presentaron un crecimiento reducido, aún cuando se alcanzaron 2 millones 790 mil nuevas plazas, en tanto la población en edad de trabajar creció en 5.98 millones.
El déficit, pues, fue de 3 millones 190 mil plazas, equivalentes a 53.36 de las reclamadas.
La tragedia se agigantó con la llegada de los panistas y sus promesas incumplidas.
¿Se acuerda usted cuando el candidato Vicente Fox prometía un crecimiento económico superior a 7% en cada uno de sus seis años de gobierno? Bien, pues el compromiso se cubrió en el acumulado de todo el sexenio.
Lo interesante del asunto es que desmenuzados los datos disponibles, el sector más dinámico en materia de creación de empleos había sido el de transformación.
Si en 1993 la industria contaba con 2 millones 970 mil empleos, siete años después la nómina global alcanzaba 4.86 millones, lo que implicó un incremento de 63.7 por ciento.
El caso es que para 2008 el número de plazas había descendido a un millón 70 mil, en una prueba fehaciente de la inconsistencia de los programas de fomento y la ausencia de una política industrial.
Otro segmento productivo que se desinfló patéticamente fue la maquila. Si entre 1993 y el año 2000 había creado 558 mil empleos, para alcanzar un millón 290 mil plazas, para 2002 sólo sobrevivían un millón 60 mil
La carta fuerte del acuerdo mercantil, pues, derivó en fiasco, en un escenario en que la dinámica exportadora que salvó al país durante la crisis del gobierno zedillista, en el foxismo y el actual se desinfló dramáticamente.
De hecho, México descendió de la posición 12 a la 15 como potencia exportadora, en tanto la economía cayó a su vez del escalón 9 al 15.
En contraste, el sector mercantil logró incrementar sus plazas en un millón 390 entre 1993 y el año 2006, para sumar otras 505 mil en 2008.
De acuerdo a unos, el desastre que genera frustración entre los jóvenes egresados de escuelas de educación superior, convirtiéndolos en taxistas, agentes de ventas o practicantes de oficios, lo generó la falta de reformas estructurales en el país.
De acuerdo a otros, la brújula se desconchinfló ante la falta de programas coherentes por parte de los gobiernos panistas.
Por lo pronto, pareciera demasiado temprano para convocar a la fiesta.
¿Se acuerda usted del proyecto Fénix que lanzó a vuelo de fanfarrias Altos Hornos de México, en la idea de revivir la hazaña del ave Roc que resucitara de sus cenizas?
¿Se acuerda usted que la firma de Alonso Ancira planteaba realizar una inversión por mil millones de dólares, en un escenario en que pactaría finalmente su salida de la suspensión de pagos a que se acogió hace ya 10 años?
Bien, pues del plato a la boca se cayó la sopa.
Bajo el pretexto de la caída del precio internacional del acero, la firma siderúrgica canceló la posibilidad
Éstos habían sido contratados por proveedores de la compañía en la espera del milagro.
SIEMENS LA LIBRA
A contrapelo de los vientos adversos que corren en la región, la firma alemana Siemens Mesoamérica cerrará este año con una facturación de mil 739 millones de dólares, 90% de los cuales se generó en el país. El monto supera las expectativas del inicio del año.
De hecho, en la inercia, se espera que el año próximo se alcance un crecimiento de ventas de 15%.
Entre los proyectos de la firma está su participación en una planta llave en mano de la cervecería Modelo en Piedras Negras; en la recuperación de la Nucleoeléctrica de Laguna Verde; en la construcción de la hidroeléctrica La Yesca...
La firma, además, dotó de tecnología a la terminal del Aeropuerto "Benito Juárez" de la Ciudad de México, además de trabajar en proyectos para una Central Termoeléctrica de la Comisión Federal de Electricidad.
EXONERAN A IBOPE
La noticia es que el juez de la causa al que recurrió Televisa para plantear una demanda contra la firma brasileña de medición de audiencia IBOPE declaró infundada la querella que apuntaba a un presunto incumplimiento de contrato.
El enfrentamiento se inició cuando la firma propiedad de Emilio Azcárraga Jean hizo señalamientos públicos en afán de vulnerar la credibilidad de la agencia, es decir, apuntando a la columna vertebral. En paralelo, Televisa renunció al Consejo de Investigación de Medios.
Lo curioso del caso es que la televisora sigue teniendo acceso a la información de IBOPE, vía una de sus filiales de medios: TV Promo.
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