Mientras el mundo en general está profundamente afectado por la recesión que la globalización ha dispersado, la India que acaba de tener elecciones está esperando para este año tener un crecimiento de al menos el 7%, según lo anunció al Parlamento el primer ministro, Man Mohan Singh.
La India es uno de los países "BRIC" que han venido estrechando lazos en una variada gama de intereses económicos políticos y culturales junto a Rusia, China y Brasil.
El crecimiento de la India no es el único en el grupo. China espera que su economía aumente al ritmo de al menos 6%. Brasil y Rusia por su parte, están aumentando sus actividades cerca del 4% y 6% respectivamente.
Es cierto que una buena parte de la energía de estos países está relacionada con la gran dimensión demográfica que cada uno tiene. China e India, son obviamente los ejemplos mayores con 1.3 y 1.1 miles de millones cada uno. Rusia tiene una población de 150 millones y Brasil, 188 millones. En esta materia, México, que cuenta ya con más de 100 millones de habitantes dentro de su territorio, no es una nación pequeña, figurando en población en el undécimo lugar mundial.
El grupo de analistas de Goldman Sachs que creó el término BRIC ha expresado que el siguiente país con perspectivas para llegar a figurar entre los países emergentes más importantes es precisamente el nuestro. El que seamos parte del TLCAN es un elemento definitivo, pero ciertamente no el único. Las vigorosas cifras de comercio exterior que mostramos, que nos han colocado entre los quince países más aditivos del mundo, el fuerte impulso del turismo dentro de nuestra estructura, avalan esta evaluación.
Los tiempos actuales, empero, no nos están ayudando. La recesión que ha asolado a la economía norteamericana ha arrastrado en buena medida a la nuestra. Desde hace tiempo hemos venido advirtiendo la grave desventaja de vincularnos estrechamente al mercado de Estados Unidos. Ni los empresarios mexicanos ni las autoridades hicieron caso a lo largo de los años. La firma del TLCAN en 1994 fue saludado como la apertura que indicaba un crecimiento de la industria y de la agricultura nacionales.
Las evaluaciones que de tiempo en tiempo han venido haciéndose de los resultados del TLCAN han revelado que los beneficiarios han sido la agricultura comercial de frutas y legumbres y la industria ensambladora. Las actividades comerciales han crecido en forma desmedida sustituyendo a las de producción física. Los servicios, muy particularmente los de la informática, han tenido un aumento impresionante, pero pocos advierten que su suerte depende del crecimiento de las actividades básicas agrícolas e industriales.
No es el momento de los lamentos sino de reconocer que para crecer al ritmo de los países BRIC necesitamos, como lo hacen ellos, unir fuerzas con los productores privados y las autoridades locales y federales, para así crear y fortalecer empresas que produzcan artículos que venimos importando innecesariamente en perjuicio del empleo nacional.
Sí, en cambio, es el momento de reflexionar seriamente cada uno de nosotros si hay que continuar en la nociva estrategia de sustitución de producción y pérdida de talentos que nos ha traído a encontrarnos débiles e impreparados para enfrentar el rudo golpeteo de la recesión, o bien debemos comenzar por fin a responder a nuestra realidad para crear y apoyar la producción en todos los sectores y regiones del país.
La estrategia que hay que ejecutar no es conceptual. Es práctica y realista. Promoción de alimentos básicos para así dotarnos de independencia y liberar los miles de millones de dólares que gastamos en importaciones. Creación de cadenas industriales, realización de grandes obras de infraestructura, exigencia de calidad en las escuelas, promoción de escuelas técnicas y de oficios y apoyo al desarrollo científico. Todos estos sectores requieren de acción directa por parte de ciudadanos entregados a sus responsabilidades y solidarios con la nación y cuya convicción no deja entrada a corruptelas.
De no tomar esta decisión, seguiremos viendo cómo nos rebasan nuestros otros colegas "de economías emergentes" y cómo los índices de desempleo y pobreza se agravan.
¡Todavía hay tiempo!
Juliofelipefaesler@yahoo.com