El director de la Oficina de Política Nacional para el Control de Drogas de los Estados Unidos, Gil Kerlikowske, apoyó la postura de México de no negociar con los narcotraficantes pues éstos son criminales y terroristas.
El funcionario estadunidense destacó el apoyo y reconocimiento de los gobiernos federal, locales y de la comunidad de Estados Unidos hacia el trabajo en esa materia de la administración mexicana.
A su vez el secretario de Salud de México, José Angel Córdova, señaló que es prematuro calificar como un fracaso las acciones del gobierno federal en la lucha contra la demanda y oferta de drogas y consideró que es momento de que empiecen a verse resultados.
En rueda de prensa conjunta, Kerlikowske afirmó que el reconocimiento se le hace al presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, por el valor que ha tenido para combatir a los cárteles de la droga.
Insistió en que no puede haber negociación con narcotraficantes "porque son criminales y los gobiernos no pueden negociar con criminales y terroristas".
Dijo que el consumo de drogas entre los jóvenes no es sólo un problema en Estados Unidos y México, sino en todo el mundo, por ello se trabaja para combatirlo, al tiempo de considerar que la legalización no es una respuesta suficiente para su solución.
Por su parte, Córdova Villalobos expresó que es prematuro calificar como un fracaso las acciones del gobierno federal en la lucha contra la demanda y la oferta que lleva de la mano desde hace dos años, y ahora se empezarán a ver los resultados.
Opinó que no se puede calificar como "fracaso" la lucha contra el narcotráfico, después de una historia de varias décadas de crecimiento.
Córdova Villalobos destacó que entre 2008 y 2009 se concluyó la estructura y conformación de centros y programas contra adicciones, "trabajo con el cual se empezará a ver resultados en cuanto a la demanda de drogas que tiene su liga con la oferta, por lo que se debe trabajar de manera conjunta".
Coincidió con el funcionario estadunidense en que los jóvenes a diferencia de otras décadas ahora están más expuestos a sustancias ilícitas hasta en forma gratuita, por ello la batalla frontal contra su oferta y demanda.
Abundó que ahora están expuestos los jóvenes hasta en 40 por ciento a la oferta, y refirió que entre 1942 y 1956 la oportunidad de uso de drogas en los menores era de 12.7 por ciento, porcentaje que ha ido en aumento y que en la década de 1972 a 1986 subió a 23.3 por ciento.